Matrimonio Matriarcal (PARTE I) [GL]

Capítulo 100: La fortuna y la desgracia van de la mano.

Yun An estaba actualmente descansando en la cama con una mascarilla.

El clima era mucho más seco en la ciudad capital que en la ciudad de Luo, y la posada se calentó con estufas, que secaron aún más el aire.

El aire seco es malo para la piel; Yun An no quería encontrarse con Lin Buxian con un rostro descuidado cuando regresara a la ciudad de Luo. Incluso si tuviera que viajar en este mundo como hombre, sentía que aún debería verse bonita mientras lo hacía.

Llamaron a la puerta. Yun An abrió ligeramente uno de sus ojos cuando preguntó perezosamente:

-¿Quién es?.

-El esposo de la dama, este es Tong Yi, un trabajador del turno de hoy. El gerente le ordenó a este que se reportara con el esposo de la dama: hay una pequeña situación en el piso de abajo, necesitamos que usted la maneje.

Al escuchar eso, Yun An inmediatamente pensó que alguien estaba aquí para buscarla. Ella saltó de la cama con su fuerza central, luego se quitó la mascarilla: "Voy ahora mismo". Caminó rápidamente detrás del biombo para lavarse la cara, luego salió de la habitación y siguió al empleado de la tienda abajo.

-¿Que pasó?- Preguntó Yun An.

Tong Yi respondió:

-Una señorita bajó las escaleras. Ella vino sola, por lo que el gerente no está seguro de qué hacer. Por favor, tome una decisión por nosotros.

Yun An dejó de caminar por un momento:

-¿Una señorita? Entonces, ¿para qué me llamas?.

El empleado de la tienda soltó una risa incómoda:

-Es una dama soltera y no hay nadie con ella. A juzgar por su ropa, parece ser la hija de una familia grande e importante. El gerente y yo realmente no podemos servirla, es por eso que nos aventuramos a preguntarle al esposo de la señora.

Yun An lo entendió. Así que eso es lo que está pasando.

Las mujeres solteras eran una existencia muy especial en el reino de Yan. Un movimiento mal manejado podría conducir al desastre, y Yun An se dio cuenta de ese punto cuando era una mendiga. No es de extrañar que el gerente le pidiera que se encargara de esto.

Yun An llegó al salón principal y vio a la dama que Tong Yi mencionó de inmediato. Su suposición también fue probada más; esa jovencita estaba sentada correctamente a la mesa en el medio del pasillo, pero se había formado un "vacío" a su alrededor.

Las pocas mesas a su alrededor ya estaban vacías. Estaban ocupadas antes, pero parece que esos clientes se habían ido antes de que pudieran terminar la comida. Una pequeña fila de personas se había formado frente al mostrador, esperando pagar su cuenta.

Todavía había un par de comensales en la esquina que se sentaron de espaldas a esa joven. El gerente estaba trabajando en el ábaco mientras se disculpaba con los clientes que pagaban, pero nadie expresó ninguna insatisfacción.

Yun An miró a esa dama, luego miró a los clientes que se iban como una multitud. Sabía que no era porque esos clientes fueran amables. Era tal como había dicho el empleado de la tienda: esa dama era una clienta difícil de atender.

Habiendo vivido con Lin Buxian durante tanto tiempo, Yun An, sin saberlo, también había desarrollado los ojos de los antiguos. La ropa que Lin Buxian usaba a diario ya era la mejor que Yun An había visto desde que llegó al reino de Yan, pero todo sobre el atuendo de esta jovencita superó eso en calidad, ya sea en material, diseño o incluso en su artesanía.

En la tierra bajo los pies del Emperador, los altos funcionarios se unen como nubes. Este también fue un período único. Esta joven solitaria podría ser la hija preciada de alguna persona importante que se perdió de su familia por alguna razón y vino a esta posada en busca de refugio de la nieve.