Capítulo 44

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Esa noche, Dean Sun del Hospital Provincial se apresuró a llegar con la sangre O, junto con un equipo élite de médicos, finalmente logró traer de regreso a Wowo de las puertas del inframundo.

Con suficiente sangre, la operación se desarrolló sin problemas. Después de una noche de duro trabajo, Wowo finalmente salió de la sala de operaciones, Dean Sun salió sudando.

Qu Cheng, que había estado vigilando la puerta, envió a Luo Xiaomao a cuidar a Xu Cinian. No se apartó del lugar ni un centímetro. Cuando vio al pequeño Wowo siendo empujado, sus palmas estaban llenas de sudor, se inclinó hacia adelante y agarró la camilla. Vio la carita pálida de Wowo.

— Wowo, ¿cómo estás? Abre los ojos y mira al tío.

Qu Cheng tomó su manita y quiso llamar al pequeño, pero los ojos y labios de Wowo estaban cerrados con fuerza, yaciendo allí inmóvil, completamente insensible a su llamada. No escucho su pequeña y dulce voz llamándolo "Chengcheng", ni se arrojó a sus brazos mientras sonreía.

Wowo, Wowo

Qu Cheng no pudo evitar empujarlo suavemente, deseando ansiosamente que el pequeño le diera alguna reacción.

En ese momento, el Dr. Sun que estaba junto a la camilla lo detuvo y negó con la cabeza.

— Qu Cheng, no seas así, la anestesia del pequeño aún no ha pasado, es inútil llamarlo ahora. Déjalo descansar en la unidad de cuidados intensivos esta noche. No debes preocuparte tanto.

Cuando Qu Cheng escuchó esto, levantó la cabeza y frunció el ceño

— ¿No está ya a salvo? ¿Por qué irá a la unidad de cuidados intensivos? Dean Sun, ¿cómo es la su situación ahora?

Dean Sun le dio una palmada en el hombro y le dio una mirada tranquilizadora.

— No te preocupes, simplemente perdió demasiada sangre, pero ya no está en peligro. No tiene ninguna herida fatal en su cuerpo, por lo que no hubo problema por no recibir la sangre en ese momento. Sin embargo, después de todo, es muy joven para recibir una transfusión de sangre, por lo que es difícil garantizar que no habrá rechazo. Por lo tanto, debe permanecer en la unidad de cuidados intensivos para ser observado durante unos días. Si la situación es optimista, pronto será trasladado a la sala general.

Después de escuchar estas palabras, Qu Cheng dejó escapar un largo suspiro de alivio. La fuerza de todo su cuerpo se agotó en un instante y el cansancio se apoderó de él. Se frotó la frente y asintió con la cabeza hacia Dean Sun.

— Eso está bien, gracias por hoy. Dean Sun, si en el futuro necesitas mi ayuda, puedes decirme, te deberé este favor de por vida.

Dean Sun sonrió y agitó la mano, se quitó el cubre bocas y suspiró.

— Hace un tiempo, mi nieto fue secuestrado. Pero tú lo rescataste, te debo una. Yo te debía a ti primero. Pero Qu Cheng, se sinceró conmigo, ¿Por qué no me avisaste que tenías un hijo tan grande? Si no me hubieras necesitado hoy, ¿planeabas ocultármelo toda la vida?

Qu Cheng se quedó atónito por un momento, y luego lo miró con una expresión complicada.

— ¿Cómo... crees que somos padre e hijo?

Dean Sun también estaba aturdido. Había estado tan apurado por salvar la vida del pequeño, que se había olvidado de preguntar sobre la identidad del bebé.

— Pero ustedes dos se parecen demasiado, especialmente en los ojos. Se ve exactamente igual que cuando tú eras un niño, tu tipo de sangre es o, ¿no? Si no fueras su padre, ¿Por qué no le donaste sangre? ¿Por qué me llamaste tan apresuradamente?

Pregnancy Counterattack.Where stories live. Discover now