Naruto: El Hijo de los Sannin

Capítulo 27: Lucha para convertirte en un Chunin 1

Fuego, Hielo, Viento, Rayos y ... ¿Comida?

Estadio de Konoha

Cuatro ninjas de Taki entraron al estadio. Uno de ellos era Shibuki, el líder de Takigakure. Los otros dos eran sus dos guardaespaldas elegidos. Kegon y Yoro solían ocupar ese lugar, pero no era lo suficientemente tonto como para tenerlos en Konoha después del truco que hizo. Y el cuarto era Fu, la única ninja Taki que llegó a la final.

"Bueno, aquí es donde nos separamos", dijo Shibuki, rompiendo el silencio. "Estaré ansioso por verte en acción".

"Yo también estoy ansiosa por verme a mí misma en acción", se rió Fu.

"Bromas aparte, verte aquí me hace muy feliz y orgulloso", dijo Shibuki. "No solo para ti, sino para toda nuestra aldea. Incluso entre las aldeas menores, Taki no es muy poderoso o influyente. No tenemos números, historia de clanes o ninjas con límites de línea de sangre. Pero ahora no solo traerás orgullo y gloria para ti, si no también para nuestra casa".

"Haré mi mejor esfuerzo, Shibuki. Sabes que nunca haré algo que te moleste", respondió Fu solemnemente.

Esta vez fue Shibuki quien se rió entre dientes. "Si tan solo eso fuera cierto ..."

"¡Oye! ¡Me refiero a cosas serias!" Fu protestó, mientras ella golpeaba infantilmente el suelo con el pie.

"De todos modos, bromas aparte, estoy seguro de que te irá bien. Y recuerda no usar-"

"Sí, sí, lo sé, solo si es una emergencia. ¡Ahora vete ya! ¿No necesitas reunirte con los otros jefes del pueblo?" Fu le recordó.

"Supongo que tienes razón. Buena suerte, Fu", dijo Shibuki mientras él y sus dos guardaespaldas seguían su camino.

...

"Hokage-sama, los preparativos están casi listos", le dijo Itachi a Jiraiya. "Las Finales pueden comenzar siempre que se dé la orden".

Jiraiya había estado supervisando los preparativos para las finales de los exámenes Chunin y quería asegurarse de que todo saliera bien. Se dio cuenta de que aunque todavía era un poco temprano, algunas personas ya estaban comenzando a llenar los asientos del estadio.

"Bien", respondió Jiraiya lacónicamente. "¿Qué hay de nuestros 'invitados de honor'? ¿Han llegado?"

Itachi asintió. "Los tres."

"Si ese es el caso, dile a alguien que los guíe a la Caja de los Kages. Luego regresa a mí de inmediato", ordenó Jiraiya.

"Como desee, Hokage-sama," dijo Itachi antes de desaparecer.

Como uno de los ninjas más fuertes y posiblemente más leales de la aldea, Jiraiya había elegido a Itachi como uno de sus guardaespaldas durante el evento. El otro, Zabusa, no era tan leal, pero Jiraiya tenía una buena manera de mantenerlo a raya.

Mientras el Hokage de cabello blanco se dirigía hacia la Caja de los Kages, sintió algo. Tres de sus sellos rastreadores habían ingresado al estadio, los que pertenecían a sus tres hijos. Él sonrió. Habría odiado que Naruto hubiera sido eliminado de los exámenes por llegar tarde. Afortunadamente, sería extremadamente improbable que Tsunade permitiera que tal cosa sucediera.

"Vamos chico, enséñales a todos de qué estás hecho", pensó Jiraiya.

Poco después de que Jiraiya llegara al palco de los Kages y tomará uno de los cuatro asientos, llegó el primero de sus invitados. Un hombre al que no estaba exactamente feliz de volver a ver. Aun así, decidió que era mejor ponerse de pie y saludarlo como se merecía un Kage.