Capítulo 48: La invasión a Kirigakure 1

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Choque de los siete espadachines

Después de muchos preparativos, hoy sería. El día en que los rebeldes marcharían sobre Kirigakure y lo liberarían de su sanguinario y probablemente manipulado Kage. Si bien la moral estaba alta, la mayoría de ellos estaban bastante nerviosos. Asaltar una Gran Aldea se incluiría en lo que se consideraba una gran guerra. La batalla no sería fácil.

A medida que se acercaban, la niebla se hacía cada vez más densa. Los ninjas de Kiri explicaron a sus aliados de Konoha que mantenían una barrera de niebla permanente que rodeaba la aldea con fines defensivos. Pero mientras que dicha niebla obstaculizaría a los ninjas de Konoha, haría poco para detener a otros ninjas de Kiri. Y después de caminar un rato, pudieron ver las puertas del pueblo a través de la niebla. Mei, que encabezaba la marcha, se detuvo y levantó una mano, y el ejército rebelde también se detuvo.

"Tráeme a nuestro especialista en asedio", ordenó Mei a uno de sus ANBU.

El ninja enmascarado asintió y desapareció. Un minuto después, reapareció junto a Sasuke Uchiha.

"Ahí está la puerta, Sasuke-kun. ¿Crees que puedes derribarla por tu cuenta?" Mei preguntó, un poco escéptica.

Sasuke miró a la líder rebelde, su Sharingan cobró vida. "No subestimes al Clan Uchiha".

Sasuke dio unos pasos hacia adelante y se preparó. Comenzó a reunir su chakra, ya que su Sharingan normal se transformó en el Mangekyo Sharingan Eterno.

 Comenzó a reunir su chakra, ya que su Sharingan normal se transformó en el Mangekyo Sharingan Eterno

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Se estremeció cuando se vio obligado a revivir el momento en el que creía que había matado a Naruto. Incluso si supiera que el rubio bocazas estaba vivo, la angustia se sentía muy real.

Comenzó a brillar con un aura púrpura, mientras una caja torácica fantasmal y púrpura apareció a su alrededor. Comenzaron a aparecer más huesos cuando formaba la mitad superior de un esqueleto humanoide gigante, que luego se cubrió de carne y luego una armadura. La construcción de chakra levantó su brazo izquierdo y se generó un arco en su muñeca. Tirando de la cuerda con el otro brazo, se generó una enorme flecha cubierta de llamas negras.

"Estilo Infernal: ¡Susano'o Rayo de fuego negro!"

Sasuke soltó la flecha, que atravesó la puerta con tanta fuerza que la arrancó de sus bisagras, dejando una amplia entrada para que los rebeldes entraran a la ciudad.

Hecho su trabajo, Sasuke disipó la construcción de chakra y cayó de rodillas, jadeando pesadamente. Sus compañeras de equipo se apresuraron a revisarlo.

"Sasuke-kun, ¿estás bien?" Preguntó Shizune. "¿Necesitas curación?"

Sasuke negó con la cabeza y volvió a ponerse de pie. "No, estoy bien. Usar el Susano'o es muy agotador, pero estaré bien en un par de minutos".

"Incluso entonces, trata de tomártelo con calma", aconsejó Shizune.

Después de ver el ataque de Sasuke, Mei estaba un poco aturdida ante tal demostración de poder. "Wow, y aquí pensé que estaba exagerando. Valió la pena cada centavo de hecho." Luego se volteó hacia sus tropas. "¡Las puertas están abiertas! ¡Todos entren! ¡Kirigakure es nuestro para tomar! ¡Hoy, el mundo verá el fin de la Niebla Sangrienta!" gritó mientras cargaba hacia adelante.

Naruto: El Hijo de los SanninWhere stories live. Discover now