El secreto de mi vecino

19. ¿Qué pasó ayer? (18+)

Abro los ojos y la luz que entra por la ventana me da dolor de cabeza, parpadeo varias veces.

¿Dónde estoy?, ¿Cómo llegué aquí?

No tengo idea, esto es un departamento totalmente desordenado, parece como si hubiera habido una fiesta, acabo de despertarme en el suelo, volteo hacia todos lados y Diego está recostado en un sillón con un gran disfraz de... ¿Dinosaurio?

¿Qué diablos pasó ayer?

Lo último que recuerdo es haber entrado en ese club con Diego e Iker, me levanto y siento mis huesos crujir, mientras empiezo a caminar a una puerta que supongo que es el baño un dolor en mi entrepierna me trae un recuerdo.

Creo que bebí demasiado lo cual hace me hace muy difícil la tarea de controlar mis hormonas, si sobria no puedo hacerlo, borracha mucho menos. Diego está con unos chicos rodeando una mesa y bebiendo demasiado, me acerco a él y paso mis brazos por su cintura —Como me gustaría ser tu maestra de tercero

Deja el vaso de lo que fuera que estuviera tomando sobre la mesa —¿Por qué?

—Para pasarte al cuarto

Eso fue suficiente como para terminar en una de las habitaciones del club, pegada a la pared con Diego entre mis piernas —Espero tengas un toper— Dijo entre besos —Por que te voy a dar hasta para llevar— Su lengua invade mi boca y no puedo esperar más, llevo mi mano a su cinturón y lo desabrocho, todo se vuelve más intenso cuando me toma por la cadera y sin nada de delicadeza me lanza en la cama, quita por completo su cinturón y con este mismo ata mis manos sobre mi cabeza, empieza a besar mi cuello y arqueo mi espalda, sube mi playera hasta mis ojos vendándolos y mete sus manos por debajo de mi espalda, desabrocha mi sostén arrancándolo de mi cuerpo.

Esta definitivamente será la mejor follada de mi vida.

Mete una mano dentro de mi pantalón y empieza a acariciarme directamente en mi humedad haciéndome retorcer con cada movimiento, de pronto dejo de sentir su caricia y oigo como baja el cierre de su pantalón, luego separa mis piernas y se posiciona entre ellas, se frota un par de veces en mi entrada haciéndome desearlo más que nunca, susurra en mi oído —Si te lastimo solo dilo.

—Mhm— Jadeo y entra completamente hasta el fondo, no me preocupo en silenciar mis gemidos, Diego entra y sale tan rápido y salvaje que siento que me puede partir en dos pero la sensación me excita aún más, mientras sigue embistiendo apachurra mis pechos —Así, Diego— Gruñe —Oh si— Siento un líquido caliente dentro de mí y la sensación me hace llegar, embiste una vez más y cae sobre mi pecho, ambos tenemos la respiración agitada, baja mi playera y abro los ojos encontrándolo aún sobre mí con una sonrisa traviesa mientras desata mis manos.

—¿Estás bien?— Pregunta agitado

—Mejor que nunca

—Eso quiere decir que...

—¿Segunda ronda?

Su silencio es mi respuesta solo que esta vez yo quiero tener el control así que con el mismo cinturón amarro sus manos y me pongo sobre él.

¡Vaya noche! Con razón estoy tan adolorida, entro en el baño y me encuentro con Iker dormido dentro de la bañera, pero eso no es lo que más me sorprende.

¡¿Estoy embarazada?!

Hay una prueba de embarazo positiva sobre el lavamanos, la tomo y corro a donde Diego se encuentra.

—Ey— Sacudo su cuerpo —Diego, despierta— Pasa su mano por su cara y abre un poco los ojos

—¿Qué?— Me voltea a ver de pies a cabeza —¿Dónde estamos?— Bosteza —¿Qué pasó anoche?— Se ve en el espejo —¿Y por qué estoy disfrazado de dinosaurio?