La Corona Olvidada

Capítulo 49

Me quedé parada pensando en que hacer apenas había pasado un minuto desde que terminó el combate.

—Hasta que por fin las encuentro.

Roxy alzó la vista y yo giré precavida.

Nerio sonrió cálida mente para su hermana, atrás de nosotras sonó el Team Yell, sin decir nada abrazo a su hermana cálidamente.

Roxy lo abrazo frustrada, Nerio consoló a su hermana con amor.

Me mordí el labio, Paul seguramente estaría solo en la sala de estar.

—Ve, la cara de preocupación se te nota a leguas.

Nerio me sonrió mientras me animaba a ir.

Corrí a la sala de estar para ver a Paul.

—No puede pasar...

Me quite la gorra dejando ver mi rostro, el guardia de la liga se quedó callado dejándome ingresar.

Busque en la sala rápidamente pero apenas Paul había siquiera ingresado a la sala.

Estaba tan perdido en él que ni siquiera me noto hasta que estuve a su lado.

—Hermana...

Sus ojos rojos y lloros voltearon a verme, un nudo en mi garganta se formo, así que extendí mis brazos para él, sosteniendo una sonrisa amable.

Paul me abrazo tan fuerte que sentía su cuerpo temblar, lo abrace de la misma manera, tal vez no era un familiar cercano para él pero siempre supe que su sueño era vencer a Lionel y ese sueño se había roto.

Los gimoteos de Paul llenaron el salón, no pude evitar llorar en silencio con él.

—Perdí... Siempre perdía ante Gloria, era tan frustrante...

Su voz entre cortada era dolorosa.

Me agache arrodillándome a su altura, sus ojos dorados brillaban tenuemente.

Mis dedos pasaron por sus ojos secando sus lágrimas y le sonreí amablemente.

—En todo este tiempo siempre te vi disfrutar de tus combates pero hoy...

Mi Rotom salió volando mostrando una foto de él sonriendo y brillando.

—Me sentí tan emocionada viéndote pelear, te divertías, más que cualquier otro competidor, Paul eres uno de los entrenadores más fuertes que conozco.

Miró en silencio la foto pero aún así parecía perdido.

—Y me alegra que disfrutarás de tus combates hasta el final.

La puerta se abrió en un golpe seco, ambos volteamos a ver a la recién llegada.

Gloria parecía haber corrido todo el campo buscando a Paul, me quite de su camino cuando corrió hacia él abrazándolo con fuerza, su mirada se veía preocupada.

Me aleje en silencio para darles espacio, sabía que estaría en buenas manos a partir de aquí.

Salí nuevamente con la gorra puesta, un hombre alto se puso gente a mí.

—Lionel tenía razón cuando te vio correr.

La voz relajada de Roy me hizo alzar la mirada inquisitiva.

—¿Me estaban vigilando? —estaba un poco asustada por ese detalle.

La mirada de Roy la desvío a la puerta, estaba serio.

—Eres en realidad parte del comité de inversores, deberías estar con ellos, no en las gradas.

No esperaba que me contestara pero su voz sonó muy formal, me dio un escalofrío.