46.

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Uno de nuestros principales sospechosos de mi último caso intentó suicidarse, así que tuvimos que ir al hospital y poner resguardo para que no se escapara a ningún lugar, era un tipo peligroso. Además estaba ayudando a Ashley con su caso de la extraña mafia que teníamos en ambas ciudades, muchísimo trabajo y poco tiempo para ver al teniente Lanzani que cada vez tenía más obligaciones en la estación, a mi parecer Leo lo estaba preparando para ser capitán pero él ni siquiera se daba cuenta. Le escribí a Euge para saber si estaba disponible y bajamos a tomar un café juntas.

—Tarde como cinco segundos en darme cuenta que están cogiendo de nuevo, ¿quieres decir algo a tu favor? —pregunté y comenzó a reírse— no te dije nada antes porque pensé que ibas a venir a casa a pedirme permiso para salir con ella nuevamente, pero en vista y considerando que ayer por segunda vez no durmió en casa creo que tengo que atacarte

—¿No? —dijo sorprendida— No pasó la noche conmigo —agregó mirando su café— la noche anterior sí, pero ayer no la vi. Capaz estuvo con Dua —dijo algo triste— hemos conversado en trabajar para recomponer las cosas pero me djio que no la presione y que no me meta en su vida porque tiene que ordenarla un poco, que la quiere mucho, es una persona "importante" para ella porque apareció en un momento feo —suspiró— no sé qué va a resultar de esto la verdad, estoy intentando ser optimista porque la amo con mi vida pero no estoy segura si Bella logrará perdoname

—Bella es muy culposa —dije con una sonrisa— seguramente se siente un poco mal por terminar eso que tiene con ella para volver a tus brazos, pero estoy segura que se muere por estar contigo, lleva mucho tiempo sufriendo por lo mismo, incluso se quejaba por no enamorarse de Dua —Euge me miró con una sonrisa— Es un momento complicado pero tienes que mantenerte fuerte

—Claro que si, como van las cosas con el teniente Lanzani? —preguntó— No lo he visto por el hospital, ya no viene tanto como antes.

—No, está a full en la estación, aprendiendo cosas nuevas del trabajo. Para mi Leo lo está preparando para cosas grandes —dije con una sonrisa— Está muy feliz, pero también lo veo poco, incluso estuvo de noche un par de días y ahí si se me complica mucho porque yo también tengo un montón de trabajo

—Me dijo Bella —agregó.

—Ashley se quedó flechada contigo —dije riendo y la sorprendí— Me estaba pidiendo tus datos 

—Por favor no le des nada mío —dijo tentada— lo menos que necesito en este momento es un problema, estoy completamente enfocada en mi familia.

—Necesitaba escuchar eso —dije con una sonrisa y le tomé la mano— Te veo triste Euge, ¿pasa algo?

—No lo sé, creo que estoy un poco cansada. Estoy trabajando demasiado, tengo un montón de cosas en la cabeza, vengo acá y esta hija de puta me tortura de una manera... creo que ya entiende que Bella y yo nos estamos acercando, no quiero dudar de su profesionalismo pero... en fin ¿Jacob, que onda?

—Ahí, sigue tratando de llamar la atención como siempre. Espero que llegue una mina y se enamore de una vez —dije riendo— La verdad es que no le doy mucha bola porque ya me hizo problemas con Peter y no quiero darle la razón

—¿A qué hora termina tu break? —escuché a la británica y me giré— necesitan manos extras en urgencias, cuando termines la charla por favor anda a darte una vuelta. Hola Lali —me saludó con una sonrisa— hay un asesino en el piso?

—Todo indica que si, todo bien? —me sentía un poco mal siendo buena onda con una persona que no trataba bien a mi amiga—¿No estás de humor o siempre hablas así? —me nació literalmente del alma y se sorprendió con mi pregunta, soltó una leve sonrisa

Dos ExtrañosWhere stories live. Discover now