No es una emoción, es una guerra, termina con tu voluntad, con tu risa y tu llanto. No se puede sentir, es como probar el mar sabiendo que sabe a sal, pero resulta tan simple en el paladar. Así crees que el problema eres tú, que no supieste beber, que no lo hiciste como debería ser. Que es mala suerte o el clima es malo. Buscas tu propia sal y no funciona, te hartas de intentar hasta que se te ocurre ahogarte en medio mar.
La vida sería el mar.
YOU ARE READING
En un atardecer
Non-FictionUna historia a través de la mente suicida. Cómo se siente la depresión. Preguntas sobre la existencia, el dolor, la realidad de la vida y Dios.