El claro del cielo encandila mis pupilas. Es grato sentir que caigo sin ver más que los colores que tiñen la inmensidad. Si quisiera vivir me gustaría pausar justo este momento y quedarme así eternamente.
Caigo en cámara lenta, la sensación del aire golpeandome la cara es de alivio. Se dice que estamos compuestos la mayor parte de vacío, en medio de átomos y moléculas que nos forman, y así se siente, caer y no sentir más que vacío, sólo vacío.
Como un lienzo en blanco, es vacío.
Como el espacio entre la tierra y las nubes, es vacío; aunque se encuentre a veces un atardecer entre ellos.
YOU ARE READING
En un atardecer
Non-FictionUna historia a través de la mente suicida. Cómo se siente la depresión. Preguntas sobre la existencia, el dolor, la realidad de la vida y Dios.