Ciego como si la luz me fuera desconocida.
Extraños suspiros que vienen y van.
La vida no la escogí, pero estaba aquí, sin rumbo.
Podía escoger irme, cuando quisiera, como quisiera, donde quisiera, pero no estaba tan seguro de que el otro lado fuera mejor que el presente.
No creía en la vida después de la muerte, pero tenía una impresión de que si cruzaba la linea de esta vida existía una puerta que se abría hacia otra dimensión, universo, o simplemente otra vida...
¿Y entonces, qué me aseguraba de que si había certeza de esa vida sería mejor?.
También pensé en ese décimo intento, ¿por qué estaba aquí?, ¿Y si estaba aquí por algo?... ¿Había algún propósito en este desdichado joven ser humano?.
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En un atardecer
Non-FictionUna historia a través de la mente suicida. Cómo se siente la depresión. Preguntas sobre la existencia, el dolor, la realidad de la vida y Dios.
