Celo

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A diferencia de Ryu Jin, que durmió como si estuviera muerto, Ilya estaba junto a la ventana bebiendo un vaso de vodka, mientras observaba cómo el sol de la mañana iluminaba lentamente el cielo.

Su mirada se movió hacia Ryu Jin y luego se alejó.

Cuando pensaba en como Ryu Jin lloraba de placer al estar dentro de él, la sangre corría hacia en su interior.

Le había dicho al omega que era como una bestia, pero él no era diferente. Se sentía amargado por ese hecho.

Fue una suerte que aun quedara una pizca de razón en su mente nublada y no eyaculara dentro de Ryu Jin. 

Se negaba absolutamente al hecho de dejar su linaje.

Por supuesto, tener relaciones sexuales durante un ciclo de calor no significaba necesariamente quedar embarazada. Se decía que era el período con la mayor probabilidad de embarazo, pero, aun así, era solo un cincuenta por ciento de probabilidad de concebir.

Aunque solo fuera un porcentaje de probabilidad, seguía siendo inaceptable.

Tock, Tock, Tock

Se escucharon golpes en la puerta

<Soy Andrei>

Después de comprobar que el hombre desnudo en su cama estuviera cubierto, Ilya respondió que pasara.

Andrei abrió la puerta y al entrar miró la cama por un momento, pero luego se detuvo frente a Ilya sin expresión.

<Me alegro de que no hayas tenido nada que ver con eso>

Ante sus palabras, Ilya levantó solo una comisura de la boca.

<Ya no hay vuelta atrás... A demás, no fue gran cosa>

Solo usó al rehén para tener sexo. Si ese fue el caso, entonces no era realmente un gran problema.

<El ciclo de calor parece haberse calmado>

Andrei miró a Ryu Jin, que estaba desnudo y dormido en la cama. Ilya de inmediato se puso de pie, cubriendo a Ryu Jin y le lanzo una mirada afilada.

<¿Llamo al médico?>

<¿Para qué?>

Andrei señaló a Ryu Jin en lugar de responder. Si deseaba mantenerlo como su omega, lo correcto sería buscar al médico y obtener una receta para los inhibidores. Incluso si no lo explicaba, no había forma de que Ilya no lo supiera.

Pero Ilya no respondió de inmediato. Sus ojos color esmeralda se profundizaron mientras se hundía en sus pensamientos.

<No es necesario.>

La respuesta que llegó después de mucho tiempo fue inesperada.

<Jefe, pero ¿y si algo así vuelve a ocurrir?>

<Te estás preocupando innecesariamente. No puedo garantizar que viva hasta su próximo ciclo de calor.>

<Ah...>

Andrei no tenía nada más que decir, así que inclinó la cabeza y dio un paso atrás para salir de la habitación de Illya, pero no se fue enseguida, se detuvo mirando la puerta por un rato.

Era extraño. Ryu Jin y el jefe eran personas extrañas. La feromona de Ryu Jin era incomparable más fuerte que la de los Omega normales.

No solo los alfas, incluso los betas, eran controlados por feromonas en cuanto se acercaban a él.

Era inimaginable que sus subordinados fueran tentados para caer ante el rehén de Ilya.

La lealtad de los miembros a Ilya era más honesta que cualquier otra organización. Y tales personas perdieron la cabeza por las feromonas y desobedecieron las órdenes de Illya. Incluso aquellos que recibieron un disparo, no se quejaron.

¿Será buena idea estafar a la mafia rusa?Where stories live. Discover now