¿Será buena idea estafar a la mafia rusa?

Si tan solo Ilya desapareciera

Jin salió del laboratorio alrededor de la hora del almuerzo. Bajo las repentinas órdenes del presidente Ryu, ahora tenía que presentar un plan de marketing y tuvo que renunciar a su trabajo de medio tiempo como interprete.

Podría preparar ese plan en el instituto, pero el presidente Ryu le puso la condición de que tenía que hacerlo por su cuenta, sin ayuda de nadie, así que mejor decidió dejar el instituto.

Se sentía sofocado, por lo que no fue directo a casa, sino a una cafetería a medio camino entre el centro de investigación y la sede de Galayev.

Hace casi un año que dejo de ir a la universidad, por lo que la idea de escribir un informe era algo extraño. Y ahora de la nada, tenía que hacer un plan de estrategia de marketing, asumiendo que la investigación que aún estaba en progreso tuviera éxito...

Pero tenía que admitir, que era mucho más cómodo formular un plan de estrategia de marketing, que seguir el contenido de investigación de la mejora del rasgo omega en el laboratorio.

Recién había terminado su segundo año universitario y hacía mucho que no leía libros sobre su especialidad. Lo último que leyó, fueron libros de su cuarto año.

'Si no fuera porque estaba tan aburrido en la universidad ¿Habría jugado con la moneda virtual?'

Jin le pidió a la secretaria de su padre que le enviara todos los datos sobre el historial de ventas de inhibidores de celo que vendía RF Farmacéutica y los nuevos anuncios de cada año.

En la mañana, cuando recibió el correo dónde le pidieron que escribiera el plan de estrategias de marketing, inmediatamente aceptó y le enviaron todos los materiales que habían preparado.

Abrió su buzón de correo y dejó escapar un profundo suspiro.

Les había pedido que enviaran todos los datos, pero ¿Por qué le enviaron una cantidad tan enorme y sin resumir?

La idea de que tendría que quedarse despierto toda la noche hizo que le doliera la espalda.

Descargó todos los materiales adjuntos al correo para abrirlos y revisarlos archivo por archivo.

El tiempo paso volando. Estaba tan absorto en la información de su laptop que tardo en darse cuenta de que alguien se había sentado en su mesa.

Jin levantó la cabeza y vio que el extraño era Ilya, quien estaba sentado con las piernas cruzadas mientras bebía café.

"¿Ah? ¿Cómo supiste que estaba aquí? ¿Podría ser que de verdad me pusiste un rastreador para saber mi ubicación?"

Recordó lo que en broma Natasha le dijo hace un tiempo. Jin frunció el ceño mientras se preguntaba que estaba sucediendo.

"Fue simple coincidencia. Me detuve porque pasé por casualidad. Incluso si te pongo un localizador, estoy seguro de que te lo descubrirías en un día. No haría algo tan estúpido como eso"

"Nunca se sabe. Tal vez me tome menos tiempo en descubrirlo. Solo que pregunte por si acaso"

Aunque pretendiera ser un hombre de negocios, Ilya seguía siendo un mafioso y no sería extraño que alguien estuviera enamorado de él en alguna parte y buscara venganza.

Pensándolo mejor, no sería mala idea tener un rastreador en su cuerpo, ya que podría convertirse en un objetivo en cualquier momento.

"Hay que decirle a Andrei que lo prepare de inmediato" Jin sonrió ante su propia sugerencia.

Estaba seguro de que Ilya no lo rechazaría. Seguramente ya tenía planes para ello, pero lo estaba tomando con calma.

Ilya no respondió y Jin continuó leyendo los datos. Pero por desgracia, ni siquiera podía pasar del mismo párrafo antes de alzar sus ojos hacia Ilya. Nadie podría ignorar las miradas que lanzaba con tanto descaro.