Andrei aconsejó que sería más seguro dejar el departamento y mudarse a la mansión, pero Ilya no respondió.
<Si mantiene a sus hombres aquí, llamará la atención de Imran.>
Andrei tenía razón.
El apartamento que Jin había alquilado era demasiado pequeño y solo cabían diez hombres y todos apretados. Al final, se vieron obligados a sacar algunos del edificio y otros a los pasillos.
No se notarían desde el exterior hasta el pasillo, pero si estaba fuera del edifici seria otra cuestión. Incluso si la mayoría de los hombres de Imran estuvieran alojados en el hotel, podrían deambular en cualquier momento, y si tenían mala suerte, podrían descubrir a los hombres de Ilya y meterse en problemas.
<Si es por Ryu Jin, ¿No puede llevarlo a casa con usted?>
Ryu Jin miró a Andrei, quien se estaba quejando. Ahora que entendia ruso, era imposible hablar en secreto.
Ryu Jin, quien hizo contacto visual con Andrei, sonrió brillantemente con una expresión como si no entendiera nada.
Casi engañaba a Andrei.
Ilya dejó escapar un suspiro, mientras miraba a Andrei y fruncía su frente.
<Vuelve a la mansión.> Jin murmuró mientras observaba a Ilya y a sus hombres <Será un poco difícil para ti no destacar.>
Tenía una sonrisa en su rostro, como si no pudiera entender qué estaba pasando.
Ilya, que había estado escuchando en silencio, se levantó de su asiento.
<Siéntate> Le ordenó a Jin.
Jin simplemente se sentó en la cama y lo miró sin comprender. Tenía una expresión de ignorancia, a pesar de que sabía lo que estaba pasando.
"Ya no tengo ninguna deuda".
Jin le sonrió y respondió con suavidad y calma, además, había hablado en inglés a propósito.
Al ver esto, las cejas de Ilya se fruncieron y Andrei se tragó un gemido.
A veces, se preguntaba si Ryu Jin había salido el vientre negro de alguien. ¿A veces? No, siempre se lo preguntaba. Desde el principio actuó como si fuera obediente, pero nadie podía ver lo que realmente estaba pensando y al final, apuñalaba a las personas por la espalda.
"¿Ninguna deuda?" preguntó Ilya.
Jin sonrió y asintió como si fuera natural.
Al ver a Jin sin parecer tenso, Andrei se le secó la boca.
¿Será que Ilya explotaría en cualquier instante?
Estaba tan nervioso que no podía soportarlo.
"¿Quién fue el que se adjuntó una tarifa a voluntad?"
Ilya estaba mencionando el millón de dólares que robó Jin.
Al principio, Jin parpadeó como si no supiera lo que estaba diciendo, pero después de un rato, emitió un sonido de 'Ahh' y lo aceptó con calma.
"Es solo el 0,1%. No significa que no puedas pagar eso de comisión ¿verdad?"
Andrei no sabía por dónde empezar. ¿Tenía que señalar la linda idea de le estaba cobrando una tarifa a la mafia, y también al jefe de la mafia? Se preguntaba si debía señalar lo absurdo de comenzar a pagar una tarifa a la misma persona que hizo desaparecer el dinero en primer lugar.
"¿Crees que me importan esas cosas insignificantes?" Ilya levantó una ceja y preguntó.
Incluso los otros subordinados que no podían entender su conversación, detectaron la frialdad en las palabras de su jefe, que los hacía sentir incómodos; pero Jin sonreía como si no supiera cuál era el problema.
