Cuando el afecto y la obsesión se mezclan con la ternura y la amabilidad, nace un verdadero acosador.
En los últimos días, Jin había estado pensando seriamente en ello.
'Me dijeron que dejaste parte de tu almuerzo y les dije que lo añadieran a tu cena, así que cómelo todo'
'Natasha no estará. Si quieres salir, llévate a Víctor contigo, no salgas solo'
'No me importa si paseas a Duna y Beck, pero no te acerques mucho a ellos, podrían morderte si se emocionan mucho'
Por las múltiples advertencias de Ilya, Jin llegó a preguntarse si todos sus movimientos eran informados. O tal vez solo había colocado cámaras por todo el lugar e Ilya estaba sentado en alguna parte, observándolo.
Pero con el pasar de los días, iba empeorando la situación.
'¿Qué es esta herida?'
Incluso mientras tenían sexo, revisaba cada parte de su cuerpo y si veía alguna pequeña herida, lo interrogaba con dureza.
"Oh, creo que fue un rasguño ocasionado por una rama cuando daba un paseo con Duna y Beck"
Ni siquiera podía llamarse una herida, apenas era un pequeño roce en el antebrazo. Aun así, Ilya endureció su rostro y le ordenó que otra persona pasearía a Duna y Beck.
"No saldrás con ellos a pasear, ellos pueden pasear solos, así que no los sacaras nuevamente"
Jin tuvo que contenerse para no responderle que era él quien necesitaba tomar aire fresco y no Duna y Beck. Pero si le daba esa respuesta, definitivamente Ilya lo acompañaría todos los días a dar un paseo.
No importaba de que manera lo viera, volvió a ser un prisionero. Se había quedado en la mansión de Ilya por voluntad, pero con cada día que pasaba encerrado, se sentía sofocado.
No le impedía salir, pero todas las veces que salía a la ciudad, Ilya despejaba su agenda y lo acompañaba. Ni siquiera lo dejaba a cargo de Natasha u otro miembro de la organización.
No solo Jin estaba preocupado por la situación. Andrei estaba irritado por la frecuencia en la que interrumpían su agenda.
Y Jin trataba de entenderlo. Había sido secuestrado por Imran y casi muere por el arma de Ilya. Así que, aunque era un poco irritante, se quedaba en silencio y lo obedecía.
Pero ya había alcanzado su límite.
Cuando no sabía si Imran seguía vivo o no, lo aguantaba, pero ahora que estaba seguro de que Imran estaba muerto, ya no pudo soportarlo.
Hace unos días, se transmitió por televisión, el gran funeral por la triste muerte del heredero de Medio Oriente.
Ahora estaba seguro de que Imran estaba muerto. Y Jin se sentía cada vez más insatisfecho con las restricciones. Era como un niño al cual no le dejaban acercarse a la orilla del mar.
'¿Esto es común cuando uno se enreda con el jefe de la mafia?'
Pero no era el compañero oficial de Ilya. ¿Aun así podría ser el objetivo de un francotirador que quisiera acabar con su vida?
<Si Jin no es su compañero ¿Entonces quién es el amante de Ilya?>
Cuando Jin expresó su insatisfacción, Natasha le respondió con duda.
A los ojos, no solo de ella sino de los demás, él era el amante y compañero de Ilya. Era suficiente con saber todo lo que había sucedido para que, a ojos de los demás, fueran vistos como compañeros.
