Final del capítulo 11
Después de salir de la ducha, Ilya sacudió su cabello mojado mientras su mirada se desviaba a la cama.
Jin seguía acostado boca abajo, completamente desnudo. Su respiración uniforme demostraba que seguía profundamente dormido.
La suave línea que corría desde su columna hasta sus nalgas en forma de melocotón llamó la atención de Ilya.
Ilya se sentó en la cama y con su dedo índice y medio, recorrió la piel, desde la nuca hasta su cintura.
El cuerpo de Jin tembló, como si respondiera al suave toque de sus dedos. Al parecer seguía dormido; aun así, a Ilya le pareció fascinante la sutil respuesta de su cuerpo.
El cuerpo de Ilya se inclinó hacia adelante y dejó un suave beso entre los omoplatos de Jin y la respuesta fue mucho más fuerte que antes.
Como si no pudiera soportarlo más, el cuerpo de Jin se movió.
"De verdad..." La voz adormecida se escuchó por lo bajo mientras luchaba por levantar sus pesados párpados "...Ya no puedo más"
Ilya agarró la barbilla de Jin cuando intentaba negar con la cabeza y la sujetó firmemente. Cuando ambos juntaron sus labios, un suave gemido salió de los labios de Jin.
La mano libre de Ilya se deslizó entre los muslos de Jin y apretó suavemente sus testículos.
"Ugh..."
"A pesar de que dices que ya no puedes más, tu cuerpo se moja fácilmente"
Los dedos de Ilya se deslizaron suavemente a lo largo del perineo antes de presionar la abertura cerrada, sintiendo cómo rápidamente se humedecía.
"¡Eso es tuyo!"
Jin trató de resistirse, pero cuando dos dedos perforaron el interior de su cuerpo al mismo tiempo, sólo pudo estirar su espalda. El líquido que mojaba su entrada eran los restos de semen de la noche anterior. Incluso Ilya sabía que esas eran las huellas que había dejado atrás.
"No importa cuánto tiempo pase dentro, si no es durante un ciclo de celo no quedare embarazado... ugh..."
Jin resopló mientras fruncía el ceño ante los dedos que agitaban su interior.
Ilya fingió no haber escuchado mientras mordisqueaba los labios de Jin.
A medida que aumentaba el número de dedos que estiraban su entrada, el volumen de sus gemidos era más alto. Su cuerpo entero comenzó a temblar cuando esos dedos que estaban profundamente en su interior comenzaron a moverse.
Cuando separo sus labios, un aliento caliente se derramó. Los ojos de Jin, quien miraba a Ilya, estaban rojos de calor.
"¿Ahora que harás?"
Cuando Ilya preguntó, Jin dejó escapar un suspiro. No parecía fácil decirle que se detuviera cuando su cuerpo ya había reaccionado y estaba caliente.
Los dedos de Ilya salieron de su interior y Jin dejó escapar un gemido, como si la sensación de no tenerlo dentro fuera extraña.
"Decide rápidamente. No tengo mucho tiempo"
Ilya tomó rápidamente la mano de Jin y la llevó al centro de sus pantalones. Tan pronto como notó que el lugar ya estaba listo, tragó saliva sin darse cuenta.
Su reacción fue tan linda, que Ilya se echó a reír.
"Dime si lo quieres" Ilya bajó la cabeza y susurró con voz profunda en su oído.
