chapter LV

890 100 75
                                    

— ¿Empiezas a sentirlo? —retiré el sudor de mi frente, ignorando las palabras de aquella alucinación que tenía mi rostro— La muerte circulándonos por la sangre, reptando por nuestra columna

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

— ¿Empiezas a sentirlo? —retiré el sudor de mi frente, ignorando las palabras de aquella alucinación que tenía mi rostro— La muerte circulándonos por la sangre, reptando por nuestra columna... —la figura se estremeció a mi lado, como si fuera capaz de sentir todo aquello— Pero nos lo merecemos, ¿no es así? —sonrió de lado y pude ver como sus dientes estaban ennegrecidos— Oh, Dios, merecemos esto y más. 

Respiré en profundidad, deseando olvidar el como me palpitaba el mordisco en la piel, y el como la sangre se me deslizaba por los dedos con cada paso.

— S-solo... un poco más. 

El sol empezó a caer, recordándome que hacía más de una hora que había abandonado mi venganza, a Negan, por unas estúpidas palabras de despedida que no me causarían más que dolor y rabia.

— Sí, ya falta poco. —respondió caminando con más agilidad que yo— ¿Crees que él estará allí? —apreté los labios tras imaginar su rostro— Qué irónico sería que no estuviera. —la alucinación soltó una risa seca que me recordó inevitablemente a Negan— Quizás salió a buscarnos, quizás esté muy lejos y jamás lleguemos a verlo de nuevo, o podría estar...— giró sobre sí misma, y por reflejo miré a los lados, pero no había más que un frío y oscuro bosque rodeándonos— Puede que no nos extrañe, quizás ni siquiera se ha dado cuenta de que no estamos.

— Cállate. —rogué, cerrando por un breve instante los ojos— Por favor, c-cállate...

Oí el chasqueo de su lengua contra el paladar, y continué caminando tras cerciorarme de que no iba a abrir de nuevo su boca. Pero me bastaron un par de metros, un par de minutos sumergida en un denso silencio, para saber que el silencio era lo último que necesitaba. 

— Él estará allí. Tiene que estarlo.

No respondió, y temí haberme quedado sola. Cada aliento que daba podía ser mi último, y no quería irme de aquel asqueroso mundo sin nadie a mi lado.

— Eso espero. —respondió finalmente, provocándome un suspiro de alivio— Morirnos sin... s-sin... —me asusté al oír su tartamudeo, su voz lúgubre y rota a mi lado.

— Morirnos en sus brazos sería una buena forma de morir. —sonreí de lado intentando tranquilizarla, aunque, realmente, era como buscar apagar mis propios miedos.

Su sonrisa se ensanchó, como si acabara de recibir de golpe una dosis pura de adrenalina. Aceleró el paso, pero cuando mis pies empezaron a arrastrarse y enredarse entre las raíces, tuvo que volver a mí.

— Vamos. —tiró de mis manos con mucha fuerza, hasta el punto de que creí que me rompería los huesos de los dedos allí mismo— No podemos morir aquí. —observó con asco su alrededor y me obligó a caminar mucho más deprisa— Ellos lo necesitan, necesitan despedirse... —tragó sus lágrimas, manteniendo ese rostro gélido que nada tenía que ver con el mío— Yo lo necesito. —su voz rompió en aquella frase, justo cuando nuestros pies tocaron el asfalto. Soltó mi mano, y me miró sobre su hombro una última vez— Ya no habrá más dolor, ni más odio. 

✓DEMON'S FEARS ⎯⎯  ᴛᴡᴅWhere stories live. Discover now