☆ ᴄᴜᴀʀᴇɴᴛᴀ ʏ ᴛʀᴇs

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Lee seguía con sus manos pegadas en la cintura ajena, mientras que las manitos de Jisung estaban sobre los anchos hombros y que de vez en cuando, iban a parar al rostro ajeno. Sus bocas estaban unidas, dándose dulces besos, Minho jamás se besó con alguien de ésta manera, si bien ya estaba costumbrado que los besos con Jisung fuesen lentos, le gustaba. Era nuevo para él ya que a las personas que había besado, eran con rudeza, con segundas intenciones sabidas.

Le gustaba que fuese diferente: que sea con cariño, con inocencia y hasta con inexperiencia. ¿Acaso se estaba volviendo loco?

—Minho hyung... —trató de separarse, pero el mayor no hacía caso—. Hyung... alguien nos puede ver.

—¿Y qué tiene? —preguntó, alzando una ceja. Al menos todos sus amigos se habían ido, así que no estaba preocupado por eso.

—Que nos dirán algo, hasta nos pueden suspender... —musitó, mirando hacia la ventana para ver si el profesor se acercaba o algun otro directivo.

—Los golpearé —confesó como si nada, recibiendo un golpe por parte del menor.

—¡No se soluciona con violencia! ¡Conecte las neuronas!

—Me golpeaste, eso es violencia.

—Lo golpee para que recapacite. Además, fue una palmadita —dijo, masajeando la zona antes golpeada.

—Qué justificación, niño —rodó sus ojos.

Notó que estaba distraído, así que se encargó de sacar una de sus manos para llevarla a su rostro y lograr que por fin lo mirase a los ojos. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué los ojos de Jisung son la cosa más hermosa que vió en toda su vida?

—Nadie vendrá, tranquilo —no sabía lo que hacía, pero siguió acariciando su mejilla con el pulgar.

—Pero... pero...

—Pero nada. Respirá hondo, alterarte así te hace mal.

No quería, pero tuvo que retirar su mano de la cintura y buscó la ajena que estaba apretando su camiseta y la tomo con cuidado, enlazando sus dedos.

—¿Tú madre esta en casa? —preguntó, sin saber a donde quería llegar.

—Sip, llegó hoy a la mañana, ¿por qué lo pregunta? —sus ojitos brillaron en demasia, y Minho, lo único que pudo hacer es observarlo, sabiendo que esa imágen no la olvidaría jamas.

—Solo quería saber. Vamos, llegarás tarde.

Volvió a dejar sus manos en la cintura ajena, esta vez para bajarlo de la mesa. Respiró, estaba tan cerca que podía volver a besarlo, pero no lo hizo, se alejó y buscó su bolso, destrabó la puerta y salió de allí.

Jisung se quedó confundido, ¿acaso no lo esperaría? La tristeza invadió su cuerpo y las lágrimas se hicieron presentes, pero las limpió lo antes posible y tomó su mochila para salir a paso rápido. Una vez afuera agradeció que no esté todo oscuro, porque como era invierno, anochecía bastante temprano, pero aún el sol estaba presente, odiaba caminar solito de noche. Sin embargo, se sorprendió al ver a Minho sentado sobre una banca a unos metros, estaba fumando.

Se limpió un poco más sus ojitos, tratando de que el maquillaje no se corra y se acercó, pero era tan solo para pasar de largo. Era como una clase de experimento, si lo veía, quizás lo detenía, y siendo sincero, quería que Minho lo acompañara hasta casa.

—¿A dónde vas, enano? —quiso sonreir, porque claramente funcionó, pero al escuchar su apodo, se detuvo enseguida.

—Enano tu abuela —insultó, pero se cubrió la boca en cuanto esas palabras salieron.

Minho largó el humo y luego una carcajada. Tiró el cigarrillo y lo pisó, luego se acercó al menor, quién seguía con la mano en su boca. Aquella imágen era jodidamente graciosa.

—Mi abuela se sentirá muy mal cuando sepa lo que dijiste...

—Hyung no... —avanzó un paso, tomó la mano del mayor y comenzó a sacudirla suavemente—. ¡No le diga a su abuelita, por favor! ¡Yo quiero mucho a todas las abuelitas! ¡Fue su culpa, Minho hyung! —el nombrado alzó las cejas y se señaló con su propio dedo—. ¡Me gusta mucho y ya se me está pegando sus modales e irresponsabilidad!

—Ahora yo soy el ofendido y no estoy bromeando. Pero bueno, me quedo con la parte en la que dices que te gusto.

—¡Usted es malo, muy malo!

—Pero alguien malo no te acompaña a casa. Vamos, se está haciendo de noche.

Jisung frunció sus labios en un piquito que Minho no tardó en besar. Y para cuando vió la sonrisa en el rostro del mayor, esta vez el rubio selló su boca mordiendo los labios en su interior, y frunció su ceño, para dejarle en claro que estaba enojado, y cuando estaba enojado, nadie lo besaba, menos un tal Lee Minho.

—Uy, un enano empacado. Das miedo —canturreó.

Sin permiso tomó la mano del menor y enlazó los dedos. Comenzaron a caminar, en silencio, pero no era incómodo, es más, era reconfortante. Minho no quería hablar y Jisung no tenía preguntas, aún así, si alguno quería decir algo, el otro estaba dispuesto a contestar. Y muy en el fondo, Minho quería que Jisung hablase.

—¿Puedo hacerle una pregunta? Pero prometa que no se reirá —al escuchar aquello, Minho se sorprendió, no sabía que Jisung pudiera leer mentes.

—Mmh... depende.

—Pero hyung... así no pienso decir nada —formó un puchero.

—Está bien, no me voy a reir, lo prometo —lo miró de reojo y notó como nuevamente fruncía su ceño, estaba pensando seriamente en qué decir, como si estuviese muy concentrado en no equivocarse.

—¿Qué es eso de sexo salvaje? —Minho abrió en grande sus ojos—. Felix me contó algo que le dijo Changbin, sobre los animales y el sexo salvaje, ¿pero no es que existen dos tipos de sexo? Entre los animales es hembra o macho y en las personas es femenino o masculino, ¿en donde entra el sexo salvaje? ¿Qué tipo es?

—Es un tipo que se mantiene entre las personas, no tienen nada que ver con los animales. Viniendo de Changbin, no te creas todo lo que él dice, ¿sí? También avísale a Felix —Minho mantuvo su promesa, aunque, más que reirse, quería largar una carcajada hasta quedarse sin voz, pero decidió explicarle seriamente lo que es—. ¿Sabes lo que es el sexo... lo que hacen las personas para tener hijos?

—Sí, ¿pero que tiene que ver?

—Ese acto, se llama sexo, relaciones sexuales o como quieras. El sexo salvaje es un nivel de rudeza cuando lo estás haciendo, ésto lo aplican las personas que les gusta la rudeza al hacerlo en la intimidad, ¿entiendes?

—Sí... ¿entonces no tiene nada que ver con el sexo si es hembra o macho, femenino o masculino?

—No, enano, no.

Y para cuando la explicación terminó, ambos estaban en la casa del menor. Jisung subió los escalones correspondientes, pero antes de entrar se giró para ver al mayor y corrió a brazarlo, siendo correspondido inmediatamente.

—Gracias por explicarme y no reirse. Que tenga buena noche, Minho hyung.

El pelinegro iba a responder, pero Jisung salió corriendo y se metio rápidamente a su casa. La sonrisa que traía era una que nunca tuvo antes, pero ésta se deshizo al ver el mensaje de su padre.

"Hoy, ven a cenar. Tenemos que hablar"

 Tenemos que hablar"

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Agárrenseeee

━ 𝐼𝑛𝑓𝑎𝑛𝑡𝑖𝑙 ⟩⟩ 𝑀𝑖𝑛𝑆𝑢𝑛𝑔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora