☆ ᴄɪɴᴄᴜᴇɴᴛᴀ ʏ sᴇɪs

17.9K 1.8K 1.2K
                                    

Largó un suspiro a la vez que el viento pegaba contra su cuerpo. El día estaba horrible y en cualquier momento lloverá, por ende, apuró el paso mientras prendía un cigarrillo.

¿Actuó de mala manera? Sí, ¿Fue un impulso totalmente estúpido? Sí. Estaba arrepentido, él no se merecía que le haga eso, ¿pero qué esperaba? En serio estaba tratando de buscar cambiar estas actitudes, pero no sabía como. No tenía paciencia, y Jisung al ser un chico que necesitaba demasiada, se preguntó seriamente si ambos encajaban.

No podia negar que sus personalidades chocaban y ambos tenian sus lados negativos, y tampoco iba a negar que le gustaba hacerlo enojar, o incluso pelear por estupideces, pero esto iba más allá. Se equivocó y actuó como idiota, sí, pero no podia verlo sufrir por una tonta gripe si él se negaba a tomar el medicamento. Quizás dijo y realizó las acciones inadecuadas, por lo que ahora, cuando puso su cuerpo dentro de la farmacia, se dió cuenta que Jisung no lo merecía.

Se dirigió al mostrador, donde un señor se hallaba leyendo el periódico, con sus lentes bien puestos y haciendo algún que otro ruido para aclarar su garganta. El señor se irguio al ver la presencia de Lee, asustado ya que no lo escuchó entrar.

—Buen dia, ¿Qué busca?

—Jarabe, de frutilla o cereza... Lo que sea que tengas.

—Oh... Sí, dejame ver.

Lee largó otro suspiro y caló del cigarrillo. Notó un cartel de prohibido fumar, uno muy desgastado, pero al otro lado había un cenicero, lleno de cigarrillos. Así que lo aplastó y lo dejó allí, si Jisung estuviese con el probablemente ahora estaría con los brazos cruzados, el ceño fruncido y probablemente sus labios también.

Y ante la imagen mental que creó, no solo lo hizo sonreir, sino que las ganas de besarlo se instalaron en cada rincón de su cuerpo.

—Tuviste suerte, tuve nuevos ingresos en la semana y se fueron, literalmente volando, pero me quedó una caja sin abrir. En pocas palabras, tengo jarabe para la tos, para el dolor de cabeza. Caramelos para la garganta, para el dolor de estómago...

—Para el dolor de cabeza, ¿como sería? Quiero decir... —su voz sonó nerviosa, a lo que el farmacéutico entendió.

—Es ibuprofeno liquido, por así decirlo. Son nuevos jarabes liberados para niños, claro y adultos también. ¿Cuanto tiempo tiene su niño o niña?

—Mi niño tiene diecisiete —el señor frunció su ceño—. Es algo delicado, no esta acostumbrado a tragar las pastillas, no le gusta —cuando vio que el mayor asintió, agregó—. Deme... Deme todo.

—¿Todo?

—Sí, sí, todo lo que sea sabor a frutilla o cereza. Todo lo que exista.

Estaba realmente confundido, lo único que entraba a comprar eran los cigarrillos y alguna que otra botella de alcohol de vez en cuando. Así que no solo estaba confundido, sino perdido y un poco nervioso.

¿Tan enamorado estaba? Claro que sí.

Pagó los productos y le agradeció al señor antes de retirarse.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
━ 𝐼𝑛𝑓𝑎𝑛𝑡𝑖𝑙 ⟩⟩ 𝑀𝑖𝑛𝑆𝑢𝑛𝑔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora