Capítulo 13

1.3K 155 12
                                    

Decir que el cazador y el ángel tenían mal la cabeza a la mañana siguiente era un eufemismo.

Cuando el sol comenzó a brillar a través de las cortinas de color claro, Dean se puso a pensar en la vida que una vez llevó como vampiro, porque maldita sea, debo ser uno de nuevo. Enterró aún más la cabeza bajo las sábanas, gimiendo ligeramente ante la luz que brillaba tras sus párpados. Le dolía todo y eso que no se movía una mierda.

Castiel empezó a despertarse cuando notó la cama moviéndose. Lo siguiente que notó fue la luz cegadora quemándole el cerebro. Enterró la cabeza más profúndamente en su almohada como si intentara esconderse. Nunca había tenido la cabeza tan mal, era horrible. ¿Por qué bebe la gente? Le dolía todo y eso que no se movía una mierda.

Sin embargo, 2 horas más tarde, tuvieron que moverse aunque fuese una mierda. En el caso de Dean, literalmente. Refunfuñó para sí mismo mientras se alejaba del calor del ángel y retiraba las mantas. Cas gimió cuando el aire frío golpeó sus piernas. Gruñendo una disculpa, Dean se tambaleó hacia el baño.

¿Por qué he bebido? Dean se sentó en el inodoro, con la cabeza entre sus manos, intentando desesperadamente de no dormirse. Pensó en que debería haberse sorprendido por haber estado tan a gusto abrazado a Cas, pero no pudo molestarse. Incluso el hecho de mentir le requería mucho esfuerzo ahora mismo.

Una pequeña sonrisa se le dibujó en la cara. Había estado acurrucadito con Castiel.

Cuando comenzó su maravillosa y corta vuelta a la cama, hubo un golpe en la puerta. Maldita sea. Se dio la vuelta y comenzó a bajar las escaleras cuando vio a Cas aparecer junto a la puerta, apoyado en el marco debido al esfuerzo que le suponía. "Vuelve a la cama," susurró apenas Dean. "Yo..." tanto Cas como Dean se estremecieron ante el volumen de la voz del ángel. "Ya me he levantado," dijo mucho más tranquilo que antes, mientras empezaba a caminar a trompicones hacia las escaleras. 

Dean miró el reloj de la pared, comprobando la hora: 12:37. Eso hace que tenga sentido el hecho de que haya alguien afuera. Abrió la puerta a un Sam de aspecto molesto.

La luz que brillaba a través de la puerta hizo que Dean entrecerrara los ojos y escuchó un gemido detrás suya, era de Cas. "Ooh. Dios. Mío. Realmente voy a matar a Gabe, y no estoy bromeando." Se abrió paso entre Dean y entró en la casa. Dean cerró la puerta y se apoyó en ella, "quiero decir que es agradable y todo eso, pero siempre está ahí, como si pudiera... ¿qué os pasa a vosotros dos?" 

El Winchester más alto miró de su hermano al ángel y viceversa. Entonces algo hizo click, "erais vosotros dos, ¿no?" Ante esto, Cas ladeó la cabeza, "¿qué, qué quieres decir?" 

Sam suspiró, "erais vosotros quienes estuvisteis sentados en el parque durante casi toda la noche, ¿no es así?" Incapaz de aguantar mucho más, Dean fue a apoyarse en el sofá, "en nuestra defensa, no sólo éramos Cas y yo, sino que también habían un par de personas más." "¿Tenéis idea de lo fuerte que se os escuchaba? Todo el complejo escuchó vuestra interpretación de 'nos gusta beber con Cas'," sacudió la cabeza, "sois increíbles, llevamos aquí menos de una semana y ya habéis encontrado "compañeros" de copas y habéis hecho que todo el lugar lo sepa."

Dean había decidido en ese mismo momento que Sam ya les había regañado lo suficiente y comenzó a caminar hacia la cocina, el café lo llamaba. "¿Para qué habías venido, Sam?" Murmuró Cas. Gracias Cas, eso le impedirá seguir. Cas debió oirlo ya que intentó disimular una pequeña carcajada con una tos. 

"Bueno," comenzó Sam, "no deja de seguirme y hablarme y literalmente se aparece siempre de la nada y no deja de hablar y por supuesto que es agradable pero yo estoy tratando de trabajar y él siempre está ahí y supongo que es muy dulce el que quiera ayudarme pero lo único que está haciendo es interponerse en mi camino. Intenté decírselo educadamente primero pero ahora se lo digo de forma directa y ni siquiera se molesta, sólo sigue detrás de mí, mirándome, como si me dijera lo bien que me veo y no sé, ¿qué hago?" Y con eso, Sam tomó una gran bocanada de aire.

"¿Así que tienes un admirador?" Dean sonrió mientras se daba la vuelta con dos tazas de café. Le entregó una a Cas y la otra a Sam antes de coger la suya propia y sentarse en la mesa. Sam se desplomó en la silla que estaba frente a él, "sí y es muy molesto." "¿Es lindo?" "¿Qué quieres decir, Dean?" "¿Es guapo? ¿Está bueno? Si quieres te lo digo en otro idioma porque..." "ya te he entendido." Dijo Sam de mal humor. Dean estaba copiando lo que él mismo le había dicho hace un par de días sólo para cabrearlo.

Cas se tomó otra taza de café antes de sentarse junto a Dean. "Pídele una cita." Dijo simplemente el ángel.

Sam abre la boca para protestar, "el rubor de tu cara muestra claramente que lo encuentras atractivo y como él está constantemente coqueteando contigo, está claro que tus sentimientos no son unilaterales, por lo tanto deberías pedirle una cita." Sam suspiró y bajó la mirada, "Cas, no siempre es así de sencillo amigo."

Al oír esto, Castiel ladeó la cabeza como preguntándole y Dean miró fijamente a su hermano, amenazándolo para que no dijese nada más.

La conversación acabó ahí.

Sam almorzó (desayuno para Cas y Dean) con ellos, charlaron un poco sobre ese sitio y lo que tenían que hacer, Sam les recordó a los chicos que tenían una sesión mañana y de repente ya eran las 2 de la tarde por lo que Sam tenía que irse.

De repente, estaban solos y juntos. Ninguno de los dos dijo nada mientras se encontraban sentados en la mesa, ambos preocupados por lo que podría recordar el otro y lo que no.

Al final terminaron, como siempre cuando no saben que decir, mirándose fijamente. Pero no una mirada hostil. Sino una mirada de esas que les lleva su tiempo. Una con la que se dicen un millón de palabras y a su vez nada. Tampoco ayuda, pero si evita que digan algo de lo que puedan arrepentirse, algo que podría hacer que las cosas se pusieran incómodas.

Cas se movió primero. Le sonrió a Dean y cogió las tazas de la mesa antes de excusarse para ir a vestirse. Dejó a Dean solo con sus pensamientos. Cuando Cas volvió a bajar, le dijo a Dean que se iría a dar un paseo para despejarse un poco y ver si había alguna actividad a la que se pudieran apuntar.

De repente, Dean se quedó completamente solo.

Sus pensamientos lo nublaban todo y no podía pensar con claridad. Como siempre hacía cuando pensaba demasiado. Dean cogió un trozo de papel y escribió una carta. 

Empezó a hacer esto cuando era joven. Escribía cartas sobre lo que realmente sentía y pensaba para no tener que agobiar a los demás. Una vez escrita, el cazador no se lo pensó dos veces mientras agarraba el mechero más cercano con la intención de dejarla arder en llamas.

Pretending to be married - TraducciónWhere stories live. Discover now