xiii. tampo

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tampo; cuando una persona retira su afecto o alegría a alguien que lo ha lastimado.
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Había pasado toda la noche sin poder dormir, pensando en que podía hacer para recuperar la confianza de Irina. nos conocíamos hace poco? si. eso impedía que yo sienta todo lo que siento por ella? no.

Siempre fui un creyente de que el amor no tiene relación con el tiempo, si no con la química; y al hacerme conocido estaba todavía mas seguro de ello. eran muy pocas las chicas que se acercaban a mi por  mi y no por fama o dinero, y cuando vi por primera vez a la argentina mirándome con esos ojos de "que le pasa a este?" "¿quien es?" sabia que si ella se quedaba conmigo, era por como era.

La había cagado? si también. las fotos que salieron con Maia eran viejas. las fotos del hotel fueron justo de la noche en el que conocí a Irina y el video que había subido a su historia realmente no entendía porque lo había subido si se ve claro como saco su mano de mi pelo porque me estaba molestando, además de que ese video si tiene un par de meses ya.

Entendía que Iri este enojada y la respetaba, iba a intentar no ser tan invasivo. pero no me iba a rendir, yo quería estar con ella porque me hacia bien; pensaba regalarle flores, cartas, chocolates y si pudiera le regalaría las estrellas hasta que me perdone o por lo menos quiera escucharme.

Así pase toda la noche, mi mente necesitaba descansar pero mi corazón estaba muy acelerado buscando una solución; y cuando la mente va hacia un lado y el corazón hacia el otro, las cosas no suelen salir del todo bien.

El martes me desperte temprano pero no me costo nada, ya que ni siquiera habia llegado a dormir bien. me levante de la cama y vi a mi hermano preparando el desayuno. - Hola - Lo salude.

- Hemanitooo - Se dio vuelta y se quedo quieto. - ¿Qué te paso? Es como si cien elefantes te hubieran caminado por arriba.

- Gracias que yo también te quiero eh - Me reí. sabia que debía tener ojeras y quizás los ojos llorosos o algo hinchados. me había despertado así y no pensaba arreglarme, no si nadie que me importe no iba a verme.

- ¿Es por...? - No pronunció su nombre como si yo fuera un objeto frágil a punto de romperse. asentí. - ¿Tienes planeado que hacer? - Negué y agarre mi cabeza con mis dos manos. - Tranquilo, ya se te va a ocurrir algo. el amor lo vence todo y no hay mejor cura que el tiempo  - Lo mire desconcertado, desde cuando mi hermano decía ese tipo de frases? - La leí hoy a la mañana en un reel de instagram, es buena no?.

Estar con mi hermano me ayudo a despejarme un poco y calmarme, me hacia reír y podíamos hablar de todo. Un rato después me fui al entrenamiento, apenas subí al auto lo primero que vi fueron los chicles de menta que usaba como excusa para verla al principio. suspire profundamente.

No me podía acordar de ella por todo y ponerme triste. tenia que salir y seguir con mi vida hasta lograr que me perdone, pero no podía sufrir las 24 horas del día.

En realidad si podía. y si el día seguía así, definitivamente iba a sufrir las 24 horas del día. el entrenamiento fue pésimo, no logre hacer nada como esperaba. mis compañeros, que siempre me estaban molestando, hoy simplemente no dijeron nada, me dedicaron una mirada con una sonrisa y siguieron su camino.

Cuando salí, sabia que la argentina todavia no estaba en el trabajo, por lo que decidi pasar y dejarle unas cosas a Martina para que se las de cuando llegue.

- Hola Martinita - Dije cuando llegué. la rubia me recibió con una sonrisa, parecía ser la única que me trataba algo normal.

- Irina no está - Sentenció.

- Ya se, vengo a dejarle esto pero para que se lo des vos, tampoco quiero que se sienta obligada a verme. - Ella asintió y tomo el paquete en sus manos.

La salude y seguí mi camino. había decidido llevarle un chocolate con una carta por cada día que pasemos alejados, quería que entienda que yo buscaba hacer las cosas bien. 

Al llegar a mi casa de nuevo me senté en la mesa y comencé a recortar papeles con forma de estrellas, note como mi celular vibro por una notificación de instagram. deje los papeles y tijeras de lado para verla.

Era un mensaje directo de Fer. un reel. uno de esos con una frase motivadora y una canción triste de fondo, reí un poco. ¿en serio pensaba que eso iba a ayudarme?. no perdí mas tiempo y seguí recortando papeles.

Cuando ya se hizo de noche fuera, mire mi celular buscando alguna notificación de la argentina, por lo menos para saber si le habían llegado mis regalos. pero no encontré nada. mañana, ella trabajaba a la mañana, por lo que intentaría llevarle yo mismo los chocolates, y también compraría una flor, un tulipán. lo anote mentalmente para no olvidarme.

Cuando mi celular se volvió a encender, le preste atención a la fecha, estábamos a martes. el sábado jugábamos contra el Sevilla en el comienzo de La Liga. respire profundo, necesitaba que todo mejore de acá al sábado, en todo sentido; me encantaría que Irina vaya a verme y también necesitaba mejorar algunas cosas, no podía pasarme lo que me pasó hoy en el entrenamiento. 

Un mensaje de Martina me devolvió a la vida real; "Pedri, ya le di los chocolates a Irina". mi corazón se acelero. "Y?" Respondí. "Pues nada, que ahora esta llorando mientras come los chocolates. pero no ha querido leer la carta". Me entristecí un poco por no poder estar ahí cuando ella estaba llorando, pero mas me entristecí cuando recordé que yo era la causa de que ella este así. Le agradecí y deje el celular a un lado.

Luego de un rato me acosté en la cama, segundo día sin recibir un mensaje de buenas noches. definitivamente hoy tampoco iba a dormir bien.



cafuné - pedriWhere stories live. Discover now