cafuné - pedri

xxviii. cuita

cuita; preocupación o problema que genera angustia o sufrimiento.

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Comenzaba la segunda semana de no tener ningún tipo de contacto con Pedri, a veces sentía que estaba aprendiendo a sobrellevarlo pero luego me daba cuenta de que no era así cuando todo me hacia recordarlo.

Además, trabajar a unos metros del camp nou tampoco ayudaba. por suerte no me habia cruzado con el en ningún momento pero si veía carteles con su cara o gente con su camiseta o fanáticos que lo nombraban.

Suspiré y seguí mi camino hacia el almacén, el frío de la mañana no era mi mejor compañero.

Entré y me prepare un café en la maquina que Ramiro habia comprado la semana pasada, era mi nueva mejor amiga. mientras lo estaba esperando, vibró mi celular con una notificación de mensaje, me estremecí al pensar que podía ser el canario. pero no fue así.

Hija, tu hermano no quiere ir a la escuela, dice que hace frío...

Podremos pasar a dejarlo en tu trabajo cuando nos vamos al nuestro?

Me reí. mi hermano era como yo, friolento... y algo alérgico al trabajo y la escuela.

Le contesté a mi madre que no tenía problema y supuse que en hora y media mi hermanito iba a aparecer saltando por la puerta, con mucha energía para la mañana.

Y así fue, luego de atender a unas pocas personas en el transcurso de la mañana. a eso de las once y media mi hermanito apareció en el local.

- Iriiii, me dejaron faltar al jardín. - Pasó para la parte de atras del mostrador y me abrazó. yo me reí y le devolví el abrazo.

- ¿Desayunaste enano? - Le pregunte y negó con la cabeza. aunque note las marcas de chocolate que tenía alrededor de toda su boca, signos de que habia desayunado tan solo unos minutos atras. - Agarra lo que quieras.

Era eso lo que quería escuchar, se sacó su campera y la tiro por cualquier lado para dirigirse a la sección de galletitas y agarrar un paquete.

Rápidamente volvió a mi lado y se sentó en la silla donde yo suelo sentarme para tener su segundo desayuno.

Mi hermanito me ayudo a sobrellevar la mañana y estaba muy agradecida por ello, la única persona a la que sabia que podia hablarle en todo momento era a Pedri. ahora no podía hablarle a el, por lo que los días se pasaban mas lentos que de costumbre. la compañía de mi hermano era algo que necesitaba. nos la pasamos haciendo bromas y me contó como al terminar el jardín se volvería "mayor".

Cuando mi turno habia acabado, prepare todo para cerrar.

- ¿Prefieres que cocine algo en casa o ir a comer en un restaurante? - Le pregunté a mi hermanito, rezaba porque decida comer en casa. tardo mucho tiempo en pensar la respuesta, estuvimos parados en la puerta del local unos minutos y cuando fue a contestar note como su mirada se distrajo con algo que se encontraba detrás mío y se quedo ahí.

- PEDRIIIIIIIIII. - Salió gritando y corriendo. ¿Podía ser posible?

Lo seguí a paso rápido pero sin correr porque yo no iba a pasar vergüenza. menos frente al canario.

Llegue y mi hermanito estaba casi colgado al mini verde queriendo abrazar a Pedri que se encontraba dentro con la ventanilla baja, el futbolista rio y salió del auto para dejarse abrazar mejor.

- Hola enano. - Le dijo mientras lo abrazaba, levantó su vista hacia mi y me dedico una sonrisa.

- Pedriiiii. - Tiro de su camisa cuando se separaron. - Ya no vienes a casa a jugar al fifa. ¿Por qué? Dijiste que era tu rival favorito. - Hizo un puchero.

El mayor le despeino un poco su pelito y sonrió con tristeza. - Estoy ocupado pequeño.

- No mientas. - Sentenció y miro al canario con el ceño fruncido, causando ternura.

- Tu hermana prefirió que nos alejemos un tiempo. pero ya voy a volver a jugar contigo Emi, por ahora no hay nada que pueda hacer. - Note como Pedri no estaba mirando a mi hermano, si no que dirigía sus ojos hacia mi.

- Iri no seas mala. - El pequeño dejo de mirar al futbolista para mirarme a mi. - ¿Por qué le dijiste eso si estas triste sin Pepi?

Trague saliva y le dije a mi hermanito que se despida del canario ya que debíamos ir a casa, se ofreció a llevarnos cuando Emi no nos prestaba atención pero yo agradecí y me negué para luego decirle un "Adiós". Eran las únicas tres palabras que habíamos compartido. gracias, no, adiós.

Para mi suerte, el resto de la semana no habia vuelto a coincidir con el canario, probablemente porque habia agarrado una gripe y estaba desde el jueves en cama reposando. aunque eso no significaba que no haya pensado en el, ¿Qué hacía estacionado en la puerta del almacén? ¿por que no le dijo que ya no estábamos juntos a mi hermanito? ¿Me extrañaba como yo a el?

Lo extrañaba. mucho. la mayoría de las noches en las que no podía dormir deseaba poder llamarlo sabiendo que vendría a buscarme lo mas rápido posible para dormir conmigo. bufaba ante mis propias ideas.

No se habia despedido la primera vez que nos alejamos, si tomaba la decisión de irse a Manchester, ¿se despediría?. esos pensamientos y preguntabas me mataban, necesitaba respuestas pero entendía que el necesitaba las tres semanas que habíamos pactado para poder dármelas.

Faltaba poco mas de una semana para que tome un decisión y para que probablemente mi vida de un giro algo inesperado.

Cuando me quise dar cuenta ya estábamos a sábado, como de costumbre tocaba ver los partidos de La Liga usando la camiseta de Pedri, mi cábala. Tirada en el sillón rodeada de pañuelos con mocos, una escena bastante deprimente.

En el entretiempo, con el partido empatado 0 a 0, me llegó un mensaje de Marti.

Amiga, hoy saldremos con Rami. ¿te sientes mejor para apuntarte?

Pensé en la propuesta, realmente me hubiera gustado aceptarla, mi madre me habia dicho que si no salía de mi casa y continuaba con mi vida nunca iba a sentirme mejor. la considere pero la termine rechazando.

No estoy con ánimos Maaaarrr, perdón. gracias ;)

No me interesaba salir, no me interesaba nada si no era con el canario. eso estaba mal. no había notado cuanto dependía de el hasta ahora, y claro, si antes estábamos todo el día juntos y no habia problemas. ahora que me hacia falta, lo notaba.

No quería ni pensar como iba a ser el primer mes luego de que Pedri me confirme que se iba a Manchester, probablemente el mes mas triste del mundo.

Suspiré y miré mientras los jugadores volvían a entrar al campo. enfocaron a Pedri, con su barba algo crecida, no la habia visto así nunca. no le quedaba mal.

Fer y Gavi eran lo mas cerca que habia estado del canario en estas dos semanas, ambos me habian contactado para saber como estaba y si necesitaba algo. me contaron que Pedri no estaba con muchos animos tampoco.

No sabia como suponía que eso me debía afectar. me sentía mal por dejarlo solo en este momento, sabiendo que debía tomar una decisión importante. pensé muchas veces en ir a buscarlo y decirle que dejemos todo como estaba, hagamos que la propuesta no existía y luego llevarnos la sorpresa cuando tenga que confirmar por si o por no. pero no podía ser tan egoísta para hacer eso, sabia que si no me alejaba de Pedri en estas ultimas semanas, el me elegiría antes que al Manchester. su hermano y su mejor amigo me lo habían confirmado.

Debía dejar que piense por si solo e intentar influir lo menos posible en su decisión. era obvio que si pasábamos estas ultimas semanas juntos iba a cegarse por eso y no por lo importante de su propuesta.

Solo esperaba que Pedri me comente cuando decida cual es su decisión, así por lo menos podría verlo una ultima vez. no iba a enojarme por nada de lo que elija, simplemente lo respetaría.

Y probablemente lo esperaría donde sea, no creía en ningún momento sentir algo así. estar con el era una explosión de emociones, pero estar sin el también. me habia sacado el apetito, las ganas de salir y planear cosas porque siempre recordaba que faltaba una persona importante a mi lado.

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esto sigue hasta que mi novio me pida disculpas, abrazo. (y si seguimos asi pedri se va a manchester e irina a alaska no me tienten)