Capitulo 31

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Observaba sin ánimos el rincón del cuarto, mientras Bernard armaba ágilmente su cubo de colores.

Me sentía el chico más desdichado del mundo. Le había prometido a Heidy sacarla de la Isla, no lo logré. Cuando conocí a Seth, creí que de alguna forma, lograría saldar mi deuda con ella. Ahora el también estaba muerto. Paul me había ayudado muchísimo, y ahora no queríamos ni hablarnos. Cari, la amaba con todo mi ser, y ahora, ella me odiaba. Jessica, ella era lo único que me quedaba, pero se sentía tan culpable que se rehusaba a hablar conmigo hasta que ella arreglara las cosas con Cari. Mi vida era una total mierda.

Y ahí estaba yo, sentado en la orilla del cuarto del siguiente amigo al que recurriría, Bernard. Sin embargo, el chico se esforzaba demasiado en el cubo, y no lo suficiente en mí. Cada vez que quería hablar, lo único que hacía era asegurarme que Jessica lo lograría, pero no contaba mucho con ello. Cari era una mujer un tanto especial, era sensible. Y cuando se enojaba, bueno...no era nada bueno. De igual forma, era una de las muchas cosas que me gustaban de ella.

Estaba tan deprimido, con el corazón roto que decidí hacer una breve lista de las cosas que más me gustaban de la chica.

Primero, me encantaba su extraña risa acompañada por esa hermosa sonrisa. Cada vez que la escuchaba reír, tomaba ese sonido como muestra de que todo iba bien. Su risa me daba fuerzas para sonreír también.

Sus ojos. No eran unos ojos azules o verdes, eran unos típicos ojos marrones, sin embargo, estaban llenos de tanto...no lo sé. Eran indescriptibles las cientos de emociones que me atacaban al ver sus hermosos ojos, simplemente me perdía observándolos.

Su personalidad, claro. Era una chica un tanto especial. Era un poco terca y decidida. Siempre que estaba dispuesta a hacer algo, no se detenía hasta lograrlo. Siempre se preocupaba por otros, siempre. En esta ocasión recibí dos apoyos, el de Cari y el de Jessica. Cari dijo lo que yo temía que alguien me dijera, creo que por eso me hizo enojar. Me dijo lo que yo ya sabía y quería evitar. Jessica, me dijo algo que en verdad tenía razón, pero estaba un poco más apegado a lo que quería oír.

Ahora, ¿Quién de las dos tenía razón? Bueno, creo que ambas. No podía esperar a que Paul se acercará a arreglar las cosas. Y sí, Paul detonó las bombas por qué yo no llegué a ayudarlo. ¿De quién era la culpa? Paul solo quería salvar su vida, yo solo quería salvar la de Seth y Paul. Además, perdí mi radio con el disparo del Cazador...eso era. Ahí estaba la respuesta. Los únicos culpables eran Mantícora.

Ahora volviendo al tema de mi relación con Cari, me sentía sumamente deprimido, como si fuera un globo y alguien decidiera pincharme con un alfiler y dejar que se me escapará el aire poco a poco hasta quedar sumamente vacío, mientras flotaba a la deriva yendo a diferentes direcciones. Así me sentía. No culpaba a Jessica por lo que hizo. Claro que me enfadaba, pero la perdonaba. A decir verdad sentía un poco de pena de por Jessica. Recordé lo que sentí cuando vi a Cari con Paul. Ella sentía exactamente lo mismo a diario desde hacía unos tres años al menos. Y en ese momento, seguro que se sentía tan culpable como yo de cada una de las muertes de mis amigos.

Luego, no me podía quitar a Jack y a Mathew de la cabeza, ¿estarían bien? Eso esperaba. Me preguntaba donde estarían en ese momento, si les había tocado el bombardeo, si algún Zombie los había atacado. ¿Estarían escondiéndose? ¿O luchando? Los extrañaba, hacían falta. Al menos el Ojo sabría lo que pasaba con ellos.

Pensé en el Ojo, y en sí de verdad lo podía ver todo. Sí si lo hacía, ¿se estaría divirtiendo? ¿Estaría con sus secuaces alimentándolo con palomitas mientras disfruta como nos desmoronamos poco a poco? Y sí no lo veía, su espía al menos, podría contárselo más tarde.

La pregunta de: "¿Quién sería el espía?" apareció por mi mente. ¿Sería Paul? Podría haberse tratado de él y habría saboteado la misión...o Jack, y por esa razón había decidido huir. Podría ser incluso Han, trabajando para Mantícora en secreto después de años cansado trabajando con WICA. Podía ser cualquiera, el solo pensarlo me hizo estremecerse.

Pero no quería pensar en eso, no ahora, cuando todos nos estábamos desmoronando poco a poco. Tal vez ese era el objetivo del Ojo, tal vez por eso dejo que el espía fuera descubierto, así todos comenzaríamos a sospechar entre nosotros hasta terminar mentándonos unos a otros. No le daría la satisfacción.

Kevin entró corriendo a la habitación.

-¿Qué pasó?-le pregunté angustiado.

Hizo una mueca.

-Dice que no piensa hablar contigo, que necesita tiempo-respondió Kevin-Detrás de mí, llegó Jessica...pero no pude oír lo que decían...lo siento.

-Sí...gracias-dije decepcionado.

-Pero, a decir verdad, se escuchaba más triste que enojada-respondió Kevin.

-Jessica lo arreglará, amigo-me animó Bernard mientras armaba una cara más de su cubo.

-Eso espero-admití.

Al menos tenía a esos dos a mi lado. Lo que a decir verdad, era bastante reconfortante. No estaba solo del todo, aún tenía amigos. Y aunque lograra cagarla también con ellos, estaría Ion...pensé en eso. No estaba solo, no del todo. Aún me quedaban amigos en ese edificio. Escuché un fuerte golpe en los pisos de abajo, seguido de algunos disparos. Joe entró a toda velocidad a la habitación con el arma en alto.

-¿Qué ocurre?-le preguntó Kevin.

-Entraron-respondió Joe-Los Zombies, entraron desde el túnel, son varios, tenemos que salir de aquí.

Escuché gritos de Cari desde la otra habitación, Bernard soltó un: "No otra vez". Me puse de pie rápidamente y corrí por el pasillo.

Virus Letal V: The DesolationWhere stories live. Discover now