CAPITULO 4: TERCER AÑO

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POV CARRIC

No se como Ray puede seguir con esa loca idea de alejarse cada vez mas de Ana, de vez en cuando viene pero solo para gritarle o tratarla mal, en esos casos siempre estamos Grace y yo para detenerlo, la última vez dejo en su brazo izquierdo un feo moretón, por la fuerza que puso en su mano, aun no puedo creer que la trate así, si ella es una bebe adorable, cada dia crece más y cada vez es más tierna.

El problema será para mí cuando cumpla 15 años tendré que ponerle un guardaespaldas para que le aleje a los jóvenes que vayan tras de ella. Sé que serán muchos, igual que a mía. Oh por dios no quiero pensar cuando llegue esa época, 2 jovencitas de 15 años perseguidas por un sin número de jóvenes con las hormonas a mil.

Hemos estado hablando con Grace de adoptar a Ana, pero yo no estoy seguro de eso. No es que no quiera a Ana, es solo que Ray es su padre y yo no. El es su padre bilógico aunque el muy idiota no lo crea.

Por otro lado cristian y Elliot casi no pasan en la casa, con los estudios y los amigos no les quedan mucho tiempo para nosotros. Ana y mía extrañan mucho a cristian pero lo bueno es que el próximo año entraran al jardín y espero que se puedan alejar un poco, no me gusta mucho la dependencia que tienen con él.

Grace tiene que ir unos días a New York por tres, así que me hare cargo de los niños. Y después tenemos una visita a una casa hogar, una de las tantas que ayuda mi dulce esposa. Estoy tranquilamente en la sala, cuando un sonido de algo quebrándose me saca de mis pensamientos.

Entro a la sala y tanto mía como Elliot están mirándome con los ojos muy abiertos, parece que también se asustaron. Sigo mi camino hasta la cocina, hay encuentro un pocillo de vidrio donde dejábamos las galletas con chispas de chocolate hecho trisas en el suelo. Cerca del mesón de la cocina una silla esta afirmada en el mueble donde estaba el pocillo. Sigo dando la vuelta al mesón y me percato que algo o más bien alguien está debajo del mesón. Una pequeña de ojos azules cristalizados aguantando las ganas de llorar. Ella esta abrazada a sus piernas y cuando se percata de mi presencia, comienza a temblar.

Justo cuando la voy a tomar entra flor, veo que esta pálida y no entiendo él porque, si lo se quebró un pocillo. Ni que se fuera acabar el mundo por un pocillo roto.

-¿Qué pasa flor?-

-el Sr. Stelle se acaba de ir señor-

-¿Cómo? Y ¿Dónde estaba que nunca lo vi?-

-pues estaba en la sala, le dije que lo buscaría y que le traería algo. Pero me dijo que lo fuera a buscar y que el vendría a la cocina por algo de tomar. Que él conocía muy bien esta casa-

-Ana ¿estaba aquí?-

-si señor, ella estaba comiendo una galleta. La deje un momento a solas, ya que maría también estaba aquí, pero parece que salió después de que me fui-

-Ana esta escondida debajo del mesón ¿la puedes sacar?-

-claro señor- escucho como le dice "ven conmigo pequeña" pero Ana lanza un chillido que nunca le había escuchado justo cuando le toca el brazo derecho. Un pensamiento horrible pasa por mi mente y si es lo que me estoy imaginando juro por mí esposa que voy a su casa y le saco la mierda a golpes.

Veo la hora y son recién las 3 de la tarde, cristian llegara más o menos en 3 horas, no creo que ella se dé con alguien más. Le digo a flor que se quede con ella pero que no la intentara sacar ya que no quería escuchar ese grito de nuevo, un grito que levanto cada uno de los vellos de mi piel. Hablo con Alfredo para que vaya a buscar a cristian a la escuela, mientras llamo a la directora para que lo deje salir. También llamo a Grace para ver si puede venir a la casa, no le doy el motivo pero ella sabe que no la llamaría si no fuera por algo importante.

Entre-lazados: Cristian y Ana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora