Entre-lazados: Cristian y Ana

S. T. CAPITULO 13: TRATO

POV CRISTIAN

-mami, ¿Cuándo nace Teddy?- Lucas le pregunta a Ana. Estamos en la sala de cine que está en la casa. Es enorme y tiene muchos cojines y un sillón grande que parece cama.

-faltan como 4 semanas, cariño- le dice. En realidad no están muy concentrados en la película. Lucas ha estado muy concentrado pintando la barriga de mamá. No sé qué dibuja, solo sé que será un mosaico igual que las otras veces.

-Ted, no muevas. Estoy pintando- Lucas regaña a Teddy. Siempre que pinta Teddy se vuelve loco. Se mueve mucho y eso hace enojar a su hermano.

-Cristian, deberías invitar a Grace y a los demás para un almuerzo en fin de semana. Seria lindo. Aunque nos ayudaron a mudarnos, no pudieron disfrutar de las comodidades de esta casa. Me encantaría hacer un almuerzo en el jardín mientras Lucas juega con los cachorros en el pasto- dice sonriendo.

-no me parece mala idea pero no harás fuerza. Estas con un embarazo muy avanzado para hacer fuerza- le digo.

-Cristian, Gail se puede hacer cargo y tú puedes ayudarla. Sabes ayer iba a la biblioteca en busca de un libro y termine en la sala de juegos. Me reí mucho, me pase. Conté mal las puertas- me dice riendo.

-aun no nos acostumbramos a la casa. Pero los cachorros están felices. ¿Los has visto últimamente?-

-no. Deben de estar afuera o deben de estar en la casa de Gail. Les encanta estar allí. Ya que, según lo que me dijo Taylor, ellos mantienen la puerta abierta por si hay que salir rápido, entonces ellos salen y entran a sus anchas. Aunque nunca roban nada. Están muy bien enseñados- me dice.

-no sé cómo los pudiste enseñar si apenas podías con tus problemas- la miro.

-quizás porque era una distracción-

-¿quieres que hable con Gail para que empiece a organizar el almuerzo?- le pregunto.

-pienso que deberías llamar a la familia para saber si pueden venir primero y luego hablar con Gail- veo que Lucas le está dando los últimos toques a su pintura.

-creo que tienes razón. ¿Cómo se encuentra tu espalda?- anoche se quejó que le dolía mucho.

-duele pero es soportable. Es más creo que en la noche podrías darme un masaje y quizás algo mas- me dice sonriendo.

-puede ser. En la noche veremos- le digo. Esta mujer luego de nuestra reconciliación ha estado más que insaciable. Sus hormonas están disparadas y eso me gusta. Lo malo es que su espalda la está matando. Hemos estados muy cuidadosos pero ella no ayuda mucho. Cuando el clímax está cerca se desespera y tiende a levantar la espalda, cosa que le provoca dolor y por lo general grita. Es una mezcla rara, entre placer y dolor. Su cuerpo está cambiando muy rápido y lugares que antes no eran sensibles ahora lo están más, y los que eran sensibles están en otro nivel.

He estado trabajando desde casa. Ross se ha encargado de todo los negocios y la superviso desde mi despacho. Cuando le explique el motivo, me mando a la mierda y me dijo que no entendía como Ana podía estar conmigo. Ella me regaño como nunca lo pensé. Me dejo que Ana estaba embarazada y era normal que tuviera esos arranques pero que el mío no tenía fundamento y más con el tiempo que duro mi alejamiento.

Después de media escuchándola, me dijo que me comportara como el hombre que piensa que doy y deje de portarme como un niño pequeño que le quitan un dulce.

Por otro lado Taylor y Gail han estado muy pendientes de nosotros, más de Ana que de Lucas o de mí. Ellos saben que Ana es pequeña y por la barriga que tiene es más que evidente que el bebé es grande. Así que están al pendiente de ella.