Nadie sabe de dónde surgieron estas sanguinarias e implacables criaturas pero cada día son mas. Son fuertes, les gusta matar a quienes no son como "ellos" y parecen moverse por un instinto incansable de violencia explicita. En todo este marrón verem...
Gregory empieza a caminar hacia atrás y Fred se asusta y avanza preocupado.
Arquea su ceja —Cuidado, vas a caer imbécil.
—¡Como si te importara una mierda!
Su rostro burlón se rompe y la preocupación se hace evidente —No te tires idiota... yo no quería hacer esto...
—¿¡Qué!? ¡Simplemente tenias que parar no era realmente difícil!
—¡Me obligaron, iban a secuestrar a mi hermanita!
Matias también se pone alerta —Woa, woa, ¡cuidado!
Gregory se sorprende al escuchar eso, pero es demasiado tarde ya que un soplido fuerte del viento hace que pierda el equilibro y cae —¡Waaaaa!
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(Se que parece super alto en la imagen xd, es lo mejor que encontré)
Gregory cae del cuarto piso del instituto, a medida que cae el viento le hace caricias en su cuerpo y él solo se arrepiente de haber saltado, realmente no le dio tiempo a pensar en nada, no fue como en las películas, casi ni se entero de su propia caída. Al terminar la caída Gregory cae sobre una camioneta, esta se dobla por el impacto y el chico muere en el acto.
De inmediato Fred se arrodilla, con sus manos se sujeta del borde de la azotea y llora arrepentido, realmente no quería asesinarlo. Matias y Gabriel se dan cuenta de ello y la culpa es transmitida hacia ellos también. Gabriel nota que la gente empieza a amontonarse en la calle, y agarra a Fred del uniforme y lo aleja del borde de la azotea.
Mati crédulo se arrodilla del ahora derrumbado Fred —¿Como es eso de que te obligaron?
Fred se limpia los mocos y lagrimas, al estar mejor se levanta y le da la espalda a sus amigos. Respira y exhala pesadamente.
—Mi hermana... Zachell me mostró fotografías de ella. Muchas, en el patio de casa con mi familia, en el jardín de infantes, en el shopping, y mientras ella dormía.
—¿¡Pero que mierda!? —Mati retrocede con la cara pálida.
—¿Eso es cierto? —Cuestiona Gabriel.
—Sí. Créelo. Zachell es un maldito monstruo de negocios... no le importa nada, me hablo como si estuviera cerrando una puta venta, me sentí un retrasado. Al principio solo se trataba de molestar al gordo, pero después me obligo a llevarlo mas y más, ustedes saben porque los presione. Usualmente tengo un limite.
—Claro viejo, yo pensé que te volviste un idiota de verdad... si no me decías esto ahora mismo quizá no volverías a saber de mí después de esto —Dice Matias.
—Fred, debemos irnos —Asegura Gabriel al ver las luces de la policía en la vereda de la escuela.
