CAP. 30.- LAS ESTRELLAS TAMBIEN SUFREN

234 15 0
                                    

CAP. 30.- LAS ESTRELLAS TAMBIEN SUFREN

"¡Pinkie!"

Pinkie se detuvo en la entrada de las barracas femeninas, escuchando como el galope de su hermana y su voz llamándola se acercaban cada vez más hasta estar exactamente tras ella.

"No lo digas, Maud. Sé que estuvo mal y que pude haber herido sus sentimientos, si aún los tiene, pero ya no puedo más. Ya no soporto verla así"

Maud suspiró "En cierto sentido, concuerdo. Pero no era necesario hablar así ni decir esas cosas hirientes" suspiró de nuevo "Ven, contémosles de esto a las demás"

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Soarin miró curiosamente a las hermanas Pie hablar y entrar a las barracas femeninas.

Miró entre la puerta de las barracas y la dirección donde se veía la tienda de Dash.

De uno, al otro, pensó en que pudo haber causado la reacción de las Pie.

Acababa de salir del comedor. Después de un rato de charla, Soarin y sus amigos decidieron que era hora de ir a dormir.

Pero justo antes de poder entrar a su tienda, Pinkie había pasado corriendo desde la dirección de la tienda de Dash. Soarin se había detenido, mirando como Maud la seguía gritando su nombre y ambas se detenían a la entrada de las barracas femeninas, entrando poco después de intercambiar palabras.

¿Qué había pasado?

¿Qué pudo haber causado una reacción así de parte de las yeguas?

Soarin miró una última vez en dirección de la tienda de Dash antes de entrar a la suya propia, cerrando la puerta-cortina tras él para impedir el paso del frío.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

"No les creyó"

"No quiso escuchar"

"Pero, querida, sin ella no podemos hacer nada"

"Debe de haber una manera"

"¿No pueden hablar con ella de nuevo? Claro... Si quieren"

"Descuiden, esto se resolverá. Pero necesitamos más tiempo"

"Lamento decírtelo, caramelo, pero tiempo es lo que menos tenemos. El domingo estaremos regresando a nuestros hogares y no tengo la cara para llegar a la granja con los cascos vacíos"

"No te preocupes, tengo un plan..."

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Soarin se sentó en el borde de su cama. Su mente lo había estado torturando, incentivándolo a salir y averiguar qué era lo que había pasado.

El invierno se sentía cada vez más cerca. En las mañanas, se despertaba con una brisa fría cubriéndolo todo y las noches eran heladas. La temporada otoño-invierno estaba en todo su esplendor, y el frío obligaba a todos a estar acurrucados entre cobijas bastante temprano si no querías morir de hipotermia.

Eh aquí porque no quería salir del calor de sus cobijas.

Pero no podría dormir hasta averiguar qué había sucedido.

Soarin se levantó de la cama, el frío azotándolo como un látigo en cuanto abandonó la protección de sus frazadas.

Con pasos alentados por el frío, se acercó a su armario y sacó uno de sus uniformes, poniéndoselo rápido. Luego, tomó una bufanda que guardaba allí y la puso alrededor de su cuello para brindarse algo más de calor.

Heridas del PasadoWhere stories live. Discover now