EPÍLOGO

10.4K 989 571
                                    

Cinco años después.

Bajé las escaleras apresuradamente, intentando no caerme por estas. Estaba tarde, después de todo. No podía darme el lujo de simplemente caminar escaleras abajo.

Necesitaba pedirle el auto prestado a Levi, para poder ir al centro comercial.

Llegué a la sala, solo para detenerme abruptamente, cuando me di de bruces con la mirada de Jessica Jackson. El mundo entero parecía ponerse en tensión, cada vez que las dos estábamos en la misma habitación.

En los pasados años, eran pocas las veces que nos cruzábamos. Ambas habíamos hecho un buen esfuerzo para lograrlo. Pero, cuando, en ocasiones como aquella, lamentablemente nos cruzábamos, estaba bastante segura de que estaba establecido el hecho de que ninguna de las dos hablaba de Owen.

Owen Jackson – Prince.

Decir que lo extrañaba era poco.

Mi corazón seguía doliendo, cada vez que algún recuerdo suyo aparecía en mi memoria. Y estaba bastante segura de que lo seguía amando. Pero aquello no se lo había dicho a nadie. No era necesario, de todas formas. No lo había vuelto a ver desde aquella vez en que rompió mi corazón en mil pedazos, antes de desaparecer de mi vida.

Un tiempo, había dicho él.

No cinco malditos años.

Al principio había tenido la esperanza de que regresaría al cabo de días, semanas o algún par de meses. Pero cuando el primer año pasó, supe que no era así. Y una parte de mi sabía que era lo mejor. Él tenía razón. Yo solo tenía dieciséis y tenía un millón de cosas por delante, para hacer. Aun así, eso no significaba que podía dejar de amarlo así nada más, de un momento a otro.

Porque sí que lo amaba.

Las cosas podían no haberse dado de la manera adecuada entre nosotros, pero sí lo amaba y nadie podía quitarme aquello.

Ni siquiera ahora, cinco años después.

-Hola, Julie -saludó Jessica, poniéndose de pie, probablemente para abrazarme, como solía hacer, hacía cinco años.

Pero se detuvo, cuando se percató de lo que estaba haciendo. Algunas costumbres simplemente eran difíciles de olvidar.

-Hola, Jess -la saludé, mostrándole una pequeña sonrisa.

No me gustaba que nuestra amistad se hubiera enfriado, a causa de todos los hechos del pasado. Pero algunas cosas no podían evitarse. Aunque, claro está, siempre podían arreglarse. Solo hacía falta que ambas lo quisiéramos. Y, que lo intentáramos, claro está.

-Estaba esperando a Levi -explicó, abrazándose a sí misma, como para protegerse.

Aquel era un gesto que yo había usado infinidad de veces, cuando era menor. Ya no. Gracioso que se sintiera como si Jessica tuviera que protegerse de mí.

-Justo lo buscaba -repliqué, comenzando a atarme el cabello en un moño desordenado, como para tener algo que hacer, que no fuera pararme ahí incómodamente.

-Seguro ya... -comenzó a decir, pero el sonido de los pasos de Levi, bajando las escaleras, evitaron que continuara.

Sonreí y me giré hacia mi hermano mayor.

-¿Me prestas tu auto? -pregunté.

Levi me observó un momento, sus ojos viajando hacia Jessica, probablemente preguntándose sobre qué diablos habríamos hablado, mientras él no estaba. Después de todo, él procuraba no dejarnos solas, fuera cual fuera el motivo. Una parte de mi creía que a él le asustaba que nos fuéramos a gritar a la cara. Y aquel pensamiento me causaba gracia, porque no había razones para que eso sucediera.

Simplemente, Julie (Clichés 2°) [EN CORRECIÓN]Where stories live. Discover now