"Un Omega Diferente"

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Había pasado un par de días desde que Sam encontró a su mate y no estaba seguro si quería ir a la escuela para encontrarselo, Teo, Melisa y Rodrigo habían venido a su casa pero no les dijo sobre el chico del tren más bien les mintió diciendo que le dolía el estómago y por eso no fue ese día, hoy era miércoles lo que quería decir que tocaba fútbol pero aún así no tenía tantos ánimos de ir.

Papá: Sam... Hijo se que aún no quieres aceptarlo pero tampoco te esconderas de él para siempre.

Sam: papá, cuando conociste a mi padre que sentiste?

Papá: cuando conocí a tu padre yo aún era un humano, pero a medida que lo conocía más y más me resultaba más dulce y tierno que cualquier otra persona, cariño el amor no te avisa solo sucede.

Sam: gracias papá, te quiero...

Papá: yo igual te quiero mucho cariño.

Sam: creo... Que hoy iré a la escuela.

Papá: así se habla cariño, prepárate te prepararé tu desayuno y te llevaré a la escuela, tus hermanos ya se fueron pero no importa te puedo llevar en el auto, tu padre ya lo reparo.

Sam: si, gracias papá.

Agradeció y abrazo a su papá un pequeño tiempo, este le sonrió con dulzura y salió de la habitación, no había tardado tanto el chico cuando esté ya se encontraba abajo desayunando con rapidez, el hombre rio un poco y tomo las llaves para luego decirle a su hijo que se apurara o perdería la segunda hora de la escuela.

Sam: voy pa!!

A los pocos minutos esté bajo del auto y corrió directo a su clase, había llegado a tiempo para su segunda clase por lo cual se sentó en el único lugar vacío que era hasta atrás aún con la atenta mirada de Teo sobre el, la clase concluyó y luego de otra más sonó el timbre para el descanso, con lentitud guardo sus cosas.

Teo: que pasó?, Por que llegaste tan tarde?

Sam: oye Teo... Tengo algo que decirte...

El pequeño lo vio extrañado pero aún así asintió y ambos salieron del salón, se sentaron debajo de un árbol y sacaron su comida, el ambiente era un poco raro, pero el chico sabía que si se lo decía a su amigo este lo aconsejaría.
El chico luego de un suspiro enpezo a contarle todo a su amigo de la infancia, cuando concluyó el otro se veía un poco pensativo, más bien analizando las opciones.

Teo: nunca me imaginé que tú mate fuera un hombre, pero aquí el problema es... Lo rechazaras?

Sam: yo... N-no se

Teo: te tengo que recordar que pasara si lo haces?, Si lo llegarás a rechazar tu lobo sufriría una gran depresión lo que provocaría su muerte y ya que es parte de ti el té arrastraría con el hasta esa condición.

Sam: lo sé!, Pero que quieres que haga? Nunca he estado con un hombre, no soy homofóbico pero en verdad no me veo haciéndolo con un hombre, sería muy extraño.

Teo: se que no lo eres, pero tienes que ver esto desde otro ángulo, encontraste a tu mate, puedes conocerlo y si al final no resulta puedes hacer un trato con el o en todo caso solo ser amigos.

Sam: creo que tienes razón, de primero debería conocerlo y luego juzgarlo, tal vez sea una buena persona y yo solo estoy aquí sentado hablando de él como si fuera un error.

Teo: vez, ahora come que si no lo haré yo.

Ambos rieron un poco para luego empezar a comer, para aligerar el ambiente habían cambiado de tema pero en ese momento los gemelos lo habían visto y se habían acercado hacia ellos.

Melisa: chicos! A qué no saben lo que escuche.

Teo: el que?, Meli tú sabes todos los rumores y chismes de la escuela que ya me sé los secretos de todos por tu culpa.

Melisa: si si, lo que sea, pero bueno!, Acabo de escuchar que hay un nuevo ingresado! Y además el nuevo maestro de lenguaje es super guapo.

Sam: por favor dime qué no le tomaste fotos ni vídeos.

Melisa: no, Rodrigo me lo impidió.

Teo: gracias amigo.

Susurro hacia el moreno, este le sonrió de lado y asintió, las cuatro personas allí conversaron un poco más sobre ese tema dejando aún lado el mate de Sam, cuando tocó el timbre todos se fueron a sus respectivos talleres, y como siempre el se fue a la cancha donde allí practicaban los del equipo de fútbol, se cambió en los vestidores y se colocó una gorra ya que el calor era en verdad muy frustrante. Platico con algunos de su equipo y salieron a la cancha donde allí se encontraba el entrenador junto con una persona más, pero se detuvo en seco cuando percibió su olor, no puede ser cierto... Su mate estaba frente a él!, Que haría?, Corría?, Lo ignoriaria?, Le habría?, Esto es más difícil que Gerardo intentando resolver un ejercicio de matemáticas.

Diosa luna, dame fuerzas para no desmayarme... Pensó mientras tenía una sonrisa falsa en el rostro y se hacercaba más y más al chico que hacía que su lobo gritara de la emoción.