Al día siguiente, después de una noche sin poder dormir, apago la alarma apenas suena y me voy a la habitación de Misty. En el pasillo hay cuatro guardias en total, dos en cada puerta, y cuando me ven tratan de darme los buenos días, pero les pido silencio, poniendo un dedo encima de los labios. Jen sigue durmiendo cuando lo dejo solo en la cama. El día anterior tuvo un día bastante agitado y ahora duerme exahusto, pero tiene sueños ligeros y no lo quiero poner a prueba haciendo ruido.
Misty esta sentada en el suelo con las piernas cruzadas, contemplando por la ventana. Ella se ve muy lejana aunque estamos en la misma habitación, tan distante, Me da una sensación triste verla. Parece haber abandonado toda esperanzada. Me estremezco de solo imaginar lo que puede estar pasando por su mente, de la cara de sus hijas, de su hogar y su marido, y siento su dolor en mi propio cuerpo, desolada, añorando el mundo que construyo con esfuerzo, extrañando su familia... Tal vez mirar ese cielo la haga sentir en casa y con ellos, lejos de esta realidad.
Al mismo tiempo yo también logro trasladarme a otro lado, en otro continente, con un chico sonriente que no sabe usar el telefono de linea. ¿Que habra sido de él desde que me fui? Quiero creer que mi carta habra bastado para que pudiera olvidarme facil. De alguna manera, lastimar a Shawn es algo que quiero evitar.
Me bajo sin hacer ruido y me siento a su lado, y sin hacer ruido, cruzando las piernas como ella. Si, a veces también lo extraño. He tratado de no pensar en él y a veces agradezco a ciertas situaciones que lo han evitado. Shawn era un chico gracioso y bastante comprensivo. Me saco de mi zona de confort. Antes de él no había planeado tener con nadie algo estable, pero podia llenar todos los huecos de mi vida.
Ojala hubiera funcionado. Tenia muchas esperanzas en nosotros.
-¿En que piensas? -me pregunta con la voz apagada. Esboza una sonrisa pero no hay ningun tipo de brillo en su mirada.
¿Que hago si Misty nunca más se recupera? He evitado preguntarle como salio de esa casa el día que salio a buscarme por miedo a lo que pueda decir. Lo unico que espero es que no haya sido tan terrible como para tener obstaculos al regresar.
-Me acorde de Shawn -susurro, incapaz de ocultar la angustia me produce verla en ese estado.
-¿El novio italiano? -pregunta sonnriendo un poquito más.
Tal vez hablar de mi vida cotidiana en Italia le haga cambiar de humor.
-¿Que tal era ese chico?
-¿Por donde empiezo? -finjo pensarlo. -¿Grande?
-¡Señorita Wilson! -me da una palmada en el brazo.
-¡Hablo de su cuerpo! -me rio -Shawn era un tipo enorme. Media alrededor uno, noventa.
-¿Cuanto?
-Era un chico muy gracioso como alto.
En realidad tengo buenos recuerdos al pensar en Shawn.
-Hacia excelentes cafes. No de los saquitos, si no que los hacia con sus propias manos y le salian espectaculares. -enseguida me empiezo a reir al recordar algo relacionado -En realidad, de hecho, la primera vez que pasamos juntos la noche él se quedo a dormir en mi casa. Yo no sabía que era la unica chica que él estaba viendo y estaba viendo a otras personas. Él estaba haciendo cafe para que desayunaramos cuando un "ex" aparecio en ese momento. Shawn le atendio y ese tipo al ver el tamaño de él se asusto y le dijo que era el cartero y que venia a darme la correspondencia a... mi puerta... en... un domingo...
Dejo de hablar por que la risa me impide continuar.
-Todo el cafe... termino en el suelo y termino rompiendo la cerradura de mi puerta por que al salir se le agarro al cinturón.
