Capitulo 59

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"Cambiar de lugar, ¿Por qué?", ​​Cheng Huan estaba un poco perpleja y pensó que vivía en un buen lugar.

Jiang Mingyuan quería decir algo, pero miró al conductor y se lo tragó de nuevo: "Olvídalo, volvamos y hablemos".

El auto realmente no es un buen lugar para hablar. Cheng Huan asintió y no preguntó más, pero al igual que un gato rascándole el corazón, siempre quiso saber la respuesta.

De vuelta a casa, Cheng Huan envió a la estrella a la sala de estudio para que juegue. Fue a preparar dos tazas de té y le dio a Jiang Mingyuan una taza: "¿Puedes hablar ahora?"

"Eso es..." Jiang Mingyuan ya ha pensado en la redacción de su discurso estos días: "La estrella se hace cada vez más grande, y la separación de los padres no es muy bueno, lo que le causará problemas, por lo que quiero pedirte que vivan abajo de mi apartamento".

"¿Abajo?"

"Sí". De hecho, él quiere que se mudaran a su propia casa, pero las cosas tienen que ir paso a paso, y no puede hacer tal solicitud en este momento. Él dijo: "Acabo de comprar un apartamento en la planta baja del lugar donde vivo. Si quieres, pueden mudarse mañana".

(N/T: Don Flash le llaman a JM, nada perdido el hombre)

"El apartamento no está muy lejos de aquí y no tendrá mucho impacto" dijo.

Cheng Huan guardó silencio.

Ella sabe que Jiang Mingyuan tiene alguna razón para decirle esto. Los niños no entienden la relación complicada entre adultos y se atreven a decir muchas cosas. Es solo que esas palabras son escuchadas por otros, y es fácil hacer que otros tengan ojos diferentes. Por ejemplo, en el avión, en el momento en que conocieron a la antigua familia Liu.

Es solo que la verdad es una cosa, pero los sentimientos son otra. Cheng Huan ahora siente que tiene algunas ideas erróneas sobre él. Está bien al estar lejos y al no poder verlo todos los días. Pero si vive bajando las escaleras y se encuentran todos los días, ¿Qué se desarrollará?. De esta manera, nadie está seguro. En el fondo, estaba un poco asustada de esto desconocido.

Cheng Huan no expresó su posición y Jiang Mingyuan no la instó. Bebió té y se humedeció los labios. Después de esperar un momento, no encontró la posición deseada, sino que recibió la llamada telefónica de Gu Mingli.

Sonó la llamada y Jiang Mingyuan frunció el ceño. También era una figura pública y estaba muy acostumbrado a la cámara. No hace mucho, sintió que alguien se estaba escabullendo y tomando una foto en la puerta del jardín de infantes. Ahora que recibió una llamada, hizo que la gente tuviera que pensar más.

No creía que hubiera algo que no pudiera ver, pero estaba molesto, suspiró y se puso de pie, "Atenderé una llamada".

"Continúa" La persona estaba ahí para confundir el corazón de Cheng Huan, y sintió un suspiro de alivio cuando escuchó el teléfono sonar, sintiendo que la presión había disminuido abruptamente, y agitó la mano para mostrar que no le importaba.

Jiang Mingyuan llevó el teléfono móvil al balcón. La puerta de vidrio del balcón y la sala de estar estaban cerrados, y solo podía ver el movimiento y no podía escuchar el sonido.

Presionó para responder: "Mamá".

"Mingyuan, ¿Sigues en el trabajo?" La voz en el otro extremo del teléfono seguía siendo suave, como si fuera solo por la preocupación normal de una madre.

"No, salí e hice algo".

"¿En serio? Con que asi es. No has vuelto por mucho tiempo. Estoy cocinando esta noche. ¿Irás a casa a cenar?"

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