Let Her Go

Capitulo 26

Me desperté y descubrí que estaba muy relajado, descansado y feliz. No había visto a Elsa realmente, pero con ver aquella vida que compartimos juntos fue más que suficiente por ahora. Meg tenía razón con respecto a Elsa, todas nuestras vidas anteriores nos encontramos, nos enamoramos y vivimos juntas porque estamos unidos mas allá de lo que cualquier persona pudiera entender, es nuestro destino encontrarnos. Y en esta vida no va a ser diferente.

Una vez que me cambie deje mi habitación y fui a la cocina, en donde me encontré con Meg y Anna que hablaban animadas. Ellas eran grandes amigas, y al parecer hacia mucho que no hablaban y se “actualizaban” de la vida de la otra. Ambas interrumpieron por unos segundos su charla para saludarme, mas ni bien les devolví el saludo ellas retomaron su conversación.

Me prepare algo que comer, y una vez que termine de comer y de lavar todo lo que había usado salí a caminar. Les avise a mi hermana y a Anna que saldría un momento, aunque no prestaron demasiada atención a lo que estaba diciendo. Afuera el viento soplaba con  fuerza y hacia bastante frio, lo normal para mediados de otoño pero decidí volver a entrar para tomar un abrigo y luego volver a salir. Las dos chicas estaban tan entretenidas en su conversación que no habían notado que había vuelto a entrar, yo solo lograba distraerme así cuando estaba con Elsa…

Comencé a caminar y aunque no recordaba estas calles sentía que yo ya conocía este lugar, sabía exactamente donde ir y presentía que no me perdería, pero no sabía hasta donde llegaría. Mas luego de caminar un rato llegue a un parque con árboles que casi no tenían hojas, la gran parte de estas estaban tiradas en el suelo en un color amarillento. A pesar del frio del lugar, yo lo sentía como un lugar cálido, algo que me hacía sentir como si este lugar fuera muy importante para mí. Y entonces lo vi venir, ni bien comencé a caminar por éste, reconocí el suelo por el que caminaba y el orden de los bancos y arboles que había a mí alrededor. Un recuerdo resurgió desde lo más hondo de mi mente dejando que me viera hace unos años atrás…

Estábamos en mi época favorita del año, el viento del frio invierno golpeaba mi rostro mas no me molestaba en lo absoluto. Todo el pasto del parque estaba cubierto por una densa y extensa capa de nieve, mientras que mas copos de nieve caían del cielo cubriendo el camino de cemento que hacía solo segundos habían limpiado para que la gente no resbalara. Los árboles, cubiertos al menos unos 10 centímetros por la nieve, se hallaban sin ninguna hoja en ellos.

Los faroles, que comenzaban a encenderse ya que comenzaba a anochecer, estaban de igual manera cubiertos en su base por una capa de al menos 10 centímetros de nieve. Yo era el único que caminaba por ahí observando cada detalle del hermoso paisaje de invierno, no todos podían apreciar la belleza de esta época del año. Y los que lo hacían generalmente observaban a través de una cámara para guardar esa imagen durante un tiempo. Mas haciendo esto nunca son capaces de darse el tiempo de disfrutarlo con sus propios ojos, prefieren guardar la imagen en una maquina que en su propio memoria. Sé que con el tiempo la mente puede alterar la imagen guardada, mientras que la imagen del aparato perdurara por siempre siendo exactamente igual, sin cambiar. Pero luego comienza a perder la “magia” del movimiento de la nieve, del viento soplando llevando consigo pequeñas nubes de polvo de nieve, del sonido…

            – ¡Jack! Espérame…

Me voltee en un segundo al reconocer la voz de Elsa. Ella venia corriendo hacia mi mientras se sostenía su gorro para que no se le cayera. Extendí mi mano hacia ella y cuando llego a mi lado la tomo, me molestaba ligeramente que nuestras manos no pudieran tener contacto directo por los guantes pero no le hice mucho caso a esto. Comenzamos a caminar uno al lado del otro, mas Elsa en seguida se detuvo.

            –Esto es incomodo.

            – ¿A qué te refieres?

            –A los guantes. Sinceramente, tenemos poderes sobre el hielo, la nieve y eso ¿para que los usamos? –le sonreí, ella tenia razón.

            –La verdad, no lo se. Supongo que es mas por costumbre que por cualquier otro motivo, ya que el frio en si no me molesta en lo absoluto.

            –A mi tampoco, ya sabes lo que digo, “el frio es parte también de mi” –ambos reímos con esto y acordamos sacarnos los guantes, al menos los que evitaban que nuestras manos se juntaran.

Guarde el guante sobrante en uno de los bolsillos de mi campera, y Elsa hizo lo mismo con el suyo. Entonces volvimos a caminar con las manos entrelazadas, se suponía que hacía mucho frio mas yo no lo sentía, menos estando junto a ella. La mire de reojo y sonreí inconscientemente al ver su piel pálida y las mejillas rosadas por el frio, era tan hermosa…

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Holaa :) Bueno, quería decirles que estoy así como teniendo problemas con lo de subir capítulos. Esto es porque se supone que hoy me iba de vacaciones a la costa, y ahí no iba a tener Internet. Bueno, ayer me entere que al final por unos problemas no nos íbamos a poder ir hoy, así que el capitulo que iba a subir ayer lo subí hoy xD En fin, se supone que para año nuevo me voy, pero voy a tratar de subir capítulos lo más seguido posible para compensar los que no voy a poder subir por no tener Internet. Bueno, quería comentarles eso nomas ah, y que voy a estar ausente por un mes por lo menos, una vez que me vaya. Besos cuídense y espero que les haya gustado :3