TRAPPED (Ian Somerhalder)

IV - Mini fiesta

-Uhm, ¿Cuántos años tienes?- pregunto Alex.

-18, ¿y ustedes?- pregunte.

-23- dijo Alex con una grande sonrisa que me puso los pelos de punta.

-Así que vives sola- Se me acercó Daniel demasiado para mi comodidad, y me removí en mi asiento.

-Sip- dije asintiendo. Daniel paso un brazo por mis hombros, me sentía incomoda, es algo estúpido porque él era muy atractivo, pero yo no estaba acostumbrada a esto. De la nada escuche música sonar, no había notado que Sophie había regresado y había puesto música.

-¡Al fin música!- grito Sophie y comenzó a bailar, movía sus caderas al ritmo de la música, y los demás no tardaron en acompañarla. Yo me quede sentada, pues era realmente mala para bailar así que decidí quedarme sentada y tomar un poco de tequila con soda Sprite, después de unos minutos, ya estaba tomando mi segundo vaso y Daniel se sentó a mi lado.

-¿Por qué no bailas, Deb?- dijo mirándome directamente.

-Soy un asco bailando- Reí un poco y tomé un poco de mi bebida. Daniel se acercó a mi oído.

-Yo creo que no eres tan mala- y mordió mi lóbulo, yo parpadee varias veces y me levante para servirme más bebida, realmente me sentía incomoda.

-¡Propongo que Debbie se tome un shot de 6 segundos!- grito Sophie.

-¡No, no, no! Estas loca- dije negando.

-¡Por favor Deb, solo así te animas a pasarla bien!- me dijo haciéndome un puchero.

-No lo sé Sophie- dije mordiéndome mi labio inferior. Daniel llegó a mi lado y pasó un brazo por mis hombros.

-Vamos Deb, yo te cuido- Daniel dijo, y fue suficiente para mandar al diablo todo.

-Sí, sí, está bien- y la sala se llenó de gritos y chiflidos.

Daniel me puso la botella en la boca y todos contaban los segundos, cuando fueron los 6, cerré los ojos y trague el líquido, me ardió como el infierno la garganta y deje pasar la sensación de nauseas que vino a mí, después me incorpore y todos rieron.

Traía muy mal sabor de boca así que me serví un vaso de jugo de piña, tome un trago y cuando voltee a mi lado izquierdo ya se encontraba Daniel.

-¿Solo jugo?- me pregunto levantando una ceja.

-Uhm, si, no quiero embriagarme tanto- tome otro sorbo.

-¿Siempre eres así de aburrida?- Dijo con un tono burlesco, la verdad me molesto su comentario.

-Ni si quiera me conoces- dije mirándolo mientras fruncía el ceño.

-Pues me has demostrado que eres aburrida- dijo con una sonrisa.

-Al diablo- dije mientras agarraba una botella de vodka y vertía bastante en mi vaso con jugo, sabía que no debía cruzar alcoholes, pero no quería verme como una idiota enfrente de ellos.

Tomé mi bebida en tiempo record y volví a prepararme lo mismo. Mientras la preparaba empecé a sentirme más ligera y algo mareada, el licor ya había hecho efecto en mí. Fui con Sophie y la abracé mientras trataba de mover mis pies con la música, ella reía exageradamente en mi oído, todo me daba vueltas y me sentía realmente bien. Me separe de ella y tome un sorbo de mi vaso, después lo deje en la mesa y empecé a tratar de mover mis caderas, trataba de repasar en mi mente los movimientos que hacia Sophie y las otras chicas de mi escuela cuando iban a fiestas, atrape mi cabello con las manos y trate de hacer movimientos sensuales, o eso creo yo.

Después unas manos se posicionaron en mi cintura y estamparon mi espalda a un fuerte pecho, lleve una de mis manos a su cuello y toque su cabello, supe que era Daniel por su cabello rizado. Estábamos bailando y trate de ver donde se encontraba Sophie, cuando la divisé ella se encontraba besándose con Zack, y después de unos segundos con Alex, yo pare de bailar y comencé a reírme, ella estaba realmente loca.

-¿Qué sucede Deb?- Me pregunto Daniel con una sonrisa en el rostro. Yo no podía dejar de reír.

-Sophie está loca- dije entre carcajadas.- Oye y ¿Dónde está Josh?- pregunte al no verlo en ninguna parte.

-Él se fue, creo que su novia no estuvo muy feliz que vinieramos al departamento de una chica- dijo levantando sus hombros en signo de indiferencia. Yo estaba demasiado ebria, no tanto como Sophie, pero estaba algo pasada, además de que yo no acostumbraba a tomar.

-Creo que será mejor que me siente- dije yendo al sillón hasta que me tomaron fuertemente de la cintura.

-Vamos Deb, hay que seguir bailando- dijo Daniel mirándome.

-Uhm está bien, solo déjame hacer algo- el asintió un poco extrañado.

Me dirigí a servirme un vaso con vodka, necesitaba armarme de valor, me lo pase y no sentí ningún ardor, así que me dirigí con Daniel y posicione sus manos a mis caderas, comencé a moverme al compás de la música. No sé cómo sucedió pero mi respiración cambio drásticamente, mire a Daniel y estampe mis labios con los de él, no dejábamos de bailar y seguíamos besándonos, era un beso desesperado, lo tome del cuello y el empezó a empujarme hacia la pared, al chocar con ella, contrajo mis caderas hacia las suyas haciéndome gemir. Yo tampoco no era muy experimentada en este tipo de situaciones, tuve una especie de encuentros de ese estilo dos o tres veces, pero nada de importancia, ahora el alcohol actuaba por mí.