TRAPPED (Ian Somerhalder)

IX - En problemas

Tome una toalla y me envolví en ella. Salí con el cabello destilando, y fui a mis cajones, tome unas bragas y un suéter extra grande que le robe a mi padre. Me volví a meter al baño sin dirigirle una mirada a Sophie. Algo dentro de mí quería culparla por lo que había pasado, pues era ella quien trajo a Daniel a mi departamento. Pero yo fui la que llevo las cosas al límite. Debí de haber negado que vinieran. Pero mi subconsciente me dijo que tal vez lo que me haya sucedido le pudo haber sucedido a Sophie. Mi corazón dejo de bombear por un segundo y me maree con el simple pensamiento. Preferiría mil veces a ver sido yo que Sophie, no le deseo esto ni a mis peores enemigos. Me puse la ropa y me cepille el cabello. Al terminar di un gran suspiro y abrí la puerta. Al ingresar al cuarto vi a Sophie sentada en la cama.

-¿Estas consiente de que son casi las 5 de la mañana?- dijo con voz firme. Decidí ignorarla y busque entre mis cajones mis calcetas favoritas. -¿Seguirás ignorándome?- pregunto saliendo de la cama. Al encontrar mis calcetas me dirigí a la cama y me las puse. Eran rosas con pequeños corazones blancos por todas partes, me llegaban hasta la rodilla.

Mire a Sophie quien estaba en medio de la habitación con el ceño fruncido y con los brazos cruzados.

-Sophie yo solo…- no pude terminar por que comenzaron a tocar mi puerta. Todas las imágenes que había querido olvidar pasaron como flashes por mi mente, y comencé a aterrarme.

-¿Quién será a esta hora? No es normal y menos si eres nueva aquí- dijo mientras salía del cuarto. En cuanto reaccioné salí disparada y traté de pararla.

-¡No abras!- dije en un susurro mientras ponía mis manos en sus hombros.

-¿Pero qué te pasa?- dijo mientras quitaba mis manos de sus hombros. Volvieron a tocar haciéndome temblar.- Primero llegas a eso de las 3 de la mañana golpeada y con los ojos rojos por lo que supongo te drogaste- iba a decir algo en mi defensa pero ella siguió hablando- luego me gritas y me dices que fuiste a la policia, te encierras en el baño por dos horas, sales e ignoras mi existencia- dijo enumerando cada accion con los dedos de su mano mientras seguía caminando hacia los insistentes toquidos, yo trataba de alejarla pero ella sencillamente era más fuerte que yo.- ¿Y ahora estas tratando de que no abra la puerta?, ¿Qué está mal contigo?- dijo mientras tomaba el pomo de la puerta.

-¡No abras!- grité desesperada mientras giraba la perilla y abría la puerta.

Nos encontramos con el rostro de Bruno claramente molesto. Y se formó un nudo en mi garganta.

-¿Tu eres el idiota que le hizo eso?- dijo Sophie molesta a Bruno.

-¿Qué? ¡Claro que no!- dijo Bruno algo alterado, lo que me hizo dar un brinco.

-Sophie, por favor, ve al cuarto- dije mientras la tomaba del brazo.

-¿Pero quién es este tipo?- dijo indicando a Bruno- Deb, si él te hizo algo solo dímelo- dijo tomándome de los hombros y mirándome fijamente. Bien, Sophie volvió a colmar mi paciencia.

-¡Que no!, hazme el favor de ir a mi cuarto, necesito hablar con él- dije mientras hacia mi propio espacio, ella me miro por unos segundos y después a Bruno, miro al piso y asintió mientras se iba. Me dirigí frente a Bruno y los nervios comenzaron a surgir dentro de mí.

-¿Qué no te dije que me esperaras en la estación de policía?- dijo enojado, sentí a mi corazón encogerse y podía oír sus latidos acelerados.

-E-estaba cansada…- trate de decir pero me interrumpió.

-¡¿Y qué tal si yo hubiera estado cansado mientras te violaba ese imbécil?!- dijo enfurecido y una vena se marcaba en su cuello. Yo estaba totalmente aterrada y sentí como las lágrimas comenzaban a acumularse en mis ojos. El pecho de Bruno subía y bajaba muy rápido, pero al verme que estaba a punto de llorar dio un suspiro y se pasó una mano por la cara.- Te busque por todas partes, pensé que… te habían hecho daño- dijo mientras tenía una de sus grandes manos en su frente obstruyendo la conexión de nuestras miradas- Volví a la estación para que me ayudaran a buscarte pero un policía me dijo que tú te habías ido con él a tu departamento, así que… aquí estoy.- dijo quitando la mano de su rostro y mirándome con unos ojos llenos de preocupación. Algo dentro de mí me decía que no era normal esta situación, una persona cualquiera me hubiera ayudado, hubiera declarado y jamás hubiera cruzado palabra conmigo, pero él tenia demasiadas atenciones conmigo.

Asentí con la cabeza mirando hacia el piso, sabía que si lo miraba a los ojos comenzaría a llorar.

-Lo siento por mi reacción, ahora sé que estas acompañada, así que te dejare tranquila- Volví a asentir y comencé a cerrar la puerta, pero una mano me impidió que la cerrara por completo. Me tensé de pies a cabeza y pensé lo peor.

-Si necesitas algo, estoy a tan solo unos metros de aquí.- Dijo Bruno sin calmar mis nervios.

-Está bien- dije esperando a que quitara el agarre de la puerta. Lo vi pasando su lengua por su labio inferior y dar una pequeña sonrisa entretanto quitaba su mano de la puerta. La cerré despacio y con seguro. Me puse a espaldas a ella y di un gran suspiro.

-Me puedes explicar…- la voz de Sophie me hizo dar un salto - ¡¿Cómo mierda alguien intento violarte?!- dijo explotando.