Cuando quiero algo lo consigo

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—Hola Tania —Pero no estaba sola —Ah hola señor...

—Tomás, Tomás Mcfuller —asentí con una sonrisa de labios sellados y mi mamá se adelantó hablar.

—Hija el es un amigo y hoy habrá una fiesta muy importante aquí en la casa, por lo que lo veras más seguido ya que tenemos negocios ligados con su empresa —asentí. Tenía un traje azul muy elegante, su cabello bien peinado, tenía un reloj brillante y sus zapatos eran impecables.

—Será un gusto para mí poder conocerte, Maddie —me sonrió.

—Puede llamarme Mad —le corregí era informal, Así —Igualmente, espero verlo hoy —pues claro que lo veras hoy torpe, ya lo oíste, me lamente mentalmente.

—Así será Mad, me despido.

—Te acompaño a la salida —completo mamá. Termine de subir los escalones y a mitad de camino me detuvo la voz de mamá nuevamente.

—Eh Mad...

—¿Sí? —suspiré

—Puedes arreglarte para esta noche, es muy importante para mí y necesito que estés presente en ella. Ya sabes, por educación —su teléfono comenzó a soñar, pero no contestó antes de recibir mi respuesta.

—Claro.

—Bien, en las cosas que te traje hay varios vestidos elegantes que irían bien con la ocasión, por favor ponte los, no vayas a salir con ropa casual. Este es mi más importante negocio y necesito comenzarlo bien si? —Asentí y me di la vuelta —y otra cosa, se amable, educada y cortés con todos los invitados de hoy.

—Siempre.

Sin más que decir subí a mi habitación a paso rápido. Me encerré y dormí unas horas más, poco después escuché voces, desde hace rato pude escucharlo, esta vez me paré y me asome a la ventana de mi balcón a ver qué sucedía. Eran personas preparando todo para hoy. Revise mi teléfono y eran las cinco de la tarde, fue buena idea tomar esa siesta por que no tendría energía para hoy y dañaría todo.

Puse música en mi celular y me dirigí al baño para ducharme, luego de asearme completamente recojo las bolsas que me dio y sacó la ropa colocándola en mi pequeño cuarto de ropa, habían tres vestido elegantes. Me decidí por el morado, terminé de organizar el closet y quedo todo limpio y organizado, organicé mi cuarto y decidí bajar por algo de comer, por que seguramente más tarde no podría. Baje, esquivando a personas y me prepare un sándwich y jugo, a pesar que personas estaban preparando comida que se veía muy rica.

—Mad ni se te ocurra comer algo de eso —Tania me manoteó para no coger uno de los bocadillos.

—Ay! si ya entendí.

—¿Qué haces aquí? Mira tus fachas, ves a alistarte, ya pronto el personal se irá y sólo quedarán algunos, no falta mucho para que lleguen los invitados.

—Tenía hambre y visto que no me deja tomar bocadillos me prepare uno yo, ya estoy casi lista, no estaré esperando a todos en la entrada —.rodé los ojos y tome mis sándwich, el jugo y lancé la manzana que me terminé.

—De acuerdo, te veo luego —con sus tacones resonando se alejó y mire a todos los lados y tomé un bocadillo, me gusto mucho y tome otro luego fui a mi habitación antes de que me viera alguien del personal y le dijera o ella me viera.

Alise mi cabello, hice rizos al final de este, me maquille lo más natural o por lo menos no tan recargada. Sombra de color tierra, me puse, labial rosa mate y el resto como cualquier otro maquillaje. Apenas eran las siete y ya la gente llegaba, yo decidí recoger todo y limpiar.

Me quedé hablando por mi teléfono con mis amigos en un grupo, y hablando con Caro.

Luego ella tocó mi puerta diciendo que ya era hora de que bajara que ya empezó y casi todos estaban abajo. Dijo que volvería por mí en diez minutos así que me puse el vestido y unos tacones negros bajos y esos me hacían caminar mejor, pero ya estaba acostumbrada porque mamá me enseñó desde pequeña, gracias a ella se caminar con tacones super delgados y altos, con plataforma etc. Fui al baño y me mire al gran espejo, me veía bonita, menos mal no tengo la autoestima por el piso y me quiero.

—Te ves hermosa, hija —.Ella no me decía tanto 'hija' cosa que me sorprendió más, ella está más formal y la mayoría de las veces me llama a por mi nombre. Yo incluso la comencé a llamar por su nombre cosa que a ella le molestaba demasiado.

Lo que sucedió la vez pasada, fue que peleé con mi madre días antes y decidí hacer todo lo contrario a lo que ella quería, tuvo una reunión muy importante en la casa que le hice la vida imposible. No le pudo ir bien, gracias a mi. Cuando quiero algo lo consigo y esa no fue la excepción. Luego en una pequeña fiesta me vestí tal como a ella no le gustaba y fui yo misma, bueno me pase, pero ella lo merecía por la discusión que tuvimos.

Deadly LoveWhere stories live. Discover now