|Lo dejaría todo| Christopher Vélez

Capítulo 32

- ¿Por qué dices eso? - Preguntó mientras me abrazaba por los hombros una vez que nos sentamos en el sofá.
- Chris, dejaste de hablarme, me evadias muchísimo, ¿Qué debía pensar? -.
- Amor mío, solo quería que esto fuera inesperado, no tienes una idea de lo que sufría no viéndote ni hablando contigo, ya he dicho que eres lo más hermoso que ha podido pasarme en la vida, ¿Cómo podría sin ti? -.
- ¿Lo dices en serio? - Pregunté con un sonrisa.
- Jamás mentiría, lamento tanto haberte hecho sentir mal, prometo que no pasará de nuevo, te amo ___, y de ahora en adelante haremos que las cosas funcionen siempre entre tú y yo, aunque cuando decidamos dar sorpresas espero que no sea con mis técnicas - Mencionó burlón.
- Oh no, ni lo pienses, la cara de amargada que tuve toda esta semana seguro fastidio a más de uno -.
- ¿Tanto influyo en ti? - Preguntó divertido, levanté el rostro y él se inclino un poco para mirarme a los ojos.
- Miento si digo que no, a mí no me intimida tu rostro hermoso de empresario importante y serio como a todas las mujeres que te miran deseando comerte con la mirada, lo que siento por ti va más allá, y eso es suficiente para que tú me importes y claro que influyas en mi vida -.
- Muñeca, me fascina de verdad que sea así, y el hecho de que las mujeres me miren deseando comerme no significa que yo sienta lo mismo, solo una mujer está en mi mente las veinticuatro horas del día, y por fortuna, ahora es mi novia -.
- Esa, señor Vélez, es la mejor parte - Dije.

Y con una sonrisa en el rostro me acerque a besar esos deliciosos labios carnosos, que definitivamente se han vuelto una adicción para mí y que ahora sin tener que pensarlo mucho podré besar hasta cansarme, o hasta que Chris ya no quiera más besos.

- Promete besarme todos los días de mi vida, amo esos labios - Pidió.

Tal vez había más conexión de la esperada.

- Mm, eso suena fascinante -.

Y como si sus labios fueran lo más delicioso de este mundo, que absolutamente para mí lo son, volví a besar a ese hombre tan hermoso y único que ahora había entrado a mi vida de la manera más bonita que hubiera podido desear.

(...)

- ¿Cómo es que planearon esto tan rápido? - Pregunté.
- Eso no se dice - Respondió Emiliano.

Estábamos Chris, Emiliano y yo sentados en el sofá mientras comíamos helado, Alison debió irse porque su mamá la necesitaba en su casa.

- Lo importante es la acción - Argumentó Chris.
- Y que hayas dicho que sí, aunque, esto no cambiara que ustedes me quieran, ¿O sí? - Preguntó Emi.

¿Cómo podría pensar eso?

- De hecho sí, cambia mucho - Comentó Christopher.

Emiliano y yo lo miramos sorprendidos.

- El que ahora ___ sea mi novia quiere decir que nuestro amor se fusiona tanto que junto puede llegar a ser mucho más grande, lo que significa - Lo miró.
- ¿Qué me quieren más? - Preguntó completando la frase de Chris.
- Mucho más campeón - Aseguró Christopher.
- Más de lo que puedes imaginarte pequeño león - Dije.
- Ustedes dos son increíbles, quisiera verlos todos los días -.
-No tienes una idea de lo felices que seríamos por eso, pero sabes que debemos trabajar y tú terminar de sanarte - Mencioné.
- Lo sé, por eso es que sigo siendo fuerte, aunque cada día duele más -.

Chris me miró un instante y de inmediato supo que lo único que más deseaba, era ver bien a Emi.

- Campeón, pronto muchas cosas van a cambiar, solo debemos darles tiempo, tú serás un niño muy sano en menos de lo que imaginas, vamos a estar contigo luchando siempre, yo sé que a veces duele y son cosas que a nadie le gustan, pero eres el pequeño más valiente que conozco, y te aseguro que vamos a unir fuerzas para que todo esté mejor - Afirmó Chris.

Dios de mi vida, ¿Por qué este hombre tiene que ser tan maravilloso en todos los aspectos? Haberle dicho que sí aquel día que me pidió salir, sin duda había sido la mejor decisión de mi vida.

- Eres fantástico Chris, me alegra mucho que estemos los tres juntos -.
- Así será siempre pequeño león - Le aseguró.
- ¿Lo prometen? - Inquirió.
- Prometido precioso - Respondí.
- Definitivamente - Completó Chris.

Los tres reímos y continuamos comiendo y jugando con Emiliano, Chris se estaba portando como nadie más conmigo y con él, y eso es algo que jamás podré pagarle porque lo increíble que nos hace sentir, solo es algo que él puede lograr, estaba tan feliz y agradecida por tener a estos dos hombres en mi vida, y confiaba de verdad en qué las cosas pudieran cambiar, Emiliano merece ser un niño feliz y sano.

- ¿Qué les parece si ustedes miran alguna película mientras yo me voy a bañar y arreglar? Digamos que ustedes se ven demasiado guapos y yo, bueno yo estoy en pijama - Dije divertida.
- Yo siempre pienso que te ves hermosa, así sea con pijama o sin ella - Mencionó Christopher haciéndome reír.
- Chris tiene razón, pero anda, ve a hacer esas cosas de niñas - Dijo Emiliano.

Chris y yo reímos, deje un beso en los labios de mi novio y uno en la frente de Emiliano para después ir a mi habitación, debía darme un baño y cambiarme, tal vez podríamos salir o hacer algo más, aunque me sentía bien con ambos chicos en casa.

(...)

Una vez que por fin terminé, salí del baño para encontrarme con Chris y Emi mirando Cars, ambos estaban tan entretenidos que definitivamente quería evitar interrumpir la escena, solo me quedé mirándolos con una sonrisa en el rostro.

- El rayo es mi favorito - Le decía Emiliano.
- Choca esos cinco porque también es el mío -.

Chris podía llegar a ser tan tierno, en poco tiempo se ganó a Emiliano, de tal manera que ahora se sienten bien estando juntos hablando de cosas que para unos parecen sencillas, pero que para ellos resultan ser importantes y valiosas.

- ¿Qué dicen si después de que termine la peli vamos al parque? - Propuse.
- Sí, vamos - Aceptó mi pequeño emocionado.
- Estoy completamente de acuerdo -.