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( chapter fourteen — thanks for the memories)
( temporada dos — episodio nueve )
ACCIÓN DE GRACIAS FUE EN PLENO CAMBIO, COMO LOS HÁBITOS DE BEBIDA DE CASSIE. Si bien no celebró la festividad, cualquier excusa para emborracharse era una razón suficiente para estar de buen humor. Además, con Izzie en modo festivo, Cassie sabía que no quería estar sobria.
Mientras Cassie terminaba su tercer trago de tequila esa mañana, Meredith bajó las escaleras, caminando de puntillas lo más silenciosamente posible.
—¡Mer! —Cassie sonrió ampliamente, señalando la botella de licor casi vacía. —¡Ven a beber conmigo!
—No puedo, lo siento, —se apresuró a salir, antes de ser detenida por Izzie con el ceño fruncido.
—Oye, ¿Qué crees que estás haciendo?
Sonó el timbre cuando Cassie disparó por cuarta vez.
—Uh, responder a la puerta,— respondió Meredith tímidamente.
—Ella va al hospital, —dijo Cassie en voz alta, señalando su bolso y haciendo que Izzie mirara a la mujer en cuestión.
—Sí, pero después ...
—Meredith, se supone que todos deben estar en la cocina a las 9 am para ayudarme a preparar la cena. ¡Es Acción de Gracias!
Meredith suspiró, —Realmente no estoy de humor.
—Pero somos familia... —comenzó Izzie antes de que el timbre la interrumpiera de nuevo.
—Tocan el timbre. —Meredith se dirigió a la puerta y la abrió para ver a tres hombres parados allí con sonrisas en sus rostros.
—¿Es aquí donde vive Georgie? —preguntó el mayor.
—¿Georgie?
Cassie se rio, llamando la atención sobre sí misma. —¡Oye, yo también lo llamo así!
—¿Dónde está, arriba?
—Oh, George. Sí.
Empujando a las chicas sin previo aviso, los hombres corrieron a través de la sala de estar y subieron las escaleras, tropezando unos con otros y cantando a medida que avanzaban. —¡O'Malley! ¡O'Malley! ¡O'Malley!
—¡Sí, O'Malley! —Cassie repitió, su puño bombeando en el aire.
Izzie se volvió hacia Meredith. —¿Debo llamar a la policía? —Volvió la mirada hacia las escaleras, lo que provocó que Meredith aprovechara la oportunidad para escabullirse de la casa.
—¡Diviértete Mer, te amo!
—¿Divertirse? —Izzie se burló, gritando detrás de ella mientras entraba en su coche. —¡Meredith, lo digo en serio! ¡Tienes que volver aquí para cenar a las 6! ¡Lo digo en serio!
