8. Desaparecido

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*Al terminar este capitulo hay un capitulo de otra historia también Dramione*

~8~

Por la mañana Hermione miró a su alrededor, tratando de identificar al rubio entre los demás alumnos que desayunaban, y respiró con alivio en cuanto lo vio sentado en una mesa, tan distanciado de todos como era posible, pero al menos allí.

Camino hasta ocupar su lugar y se sentó en su silla. Comenzó a degustar los manjares del desayuno. Se recordó mentalmente de enviarle una carta a Ron, burlándose de que ella podía seguir comiendo los platos que a él tanto le gustaban cuando venían a Hogwarts. Pero aún así, seguro su amigo le pediría que le mandara por lechuza algo de torta escondida. Habían pasado años pero Ron seguía igual.

Justo cuando estaba por levantarse de la mesa las lechuzas mensajes comenzaron a llegar, y soltaron al profeta en varias mesas, incluyendo la suya. Hermione se apresuró a agarrar el diario. Pero lo que vio en la primera página la inquietó. Draco aparecía en la primera plana. Llevaba un uniforme desgastado, y las manos encadenadas con una gruesa cadena de metal. Miraba a la cámara solo un segundo, para luego agachar la mirada. Si cuando lo vio junto a Minerva le había parecido delgado, en esa foto más parecía un esqueleto. Un par de aurores lo conducían fuera del ascensor del Ministerio. La nota prometía jugosos detalles sobre la reevaluación del juicio del menor de los Malfoy.

Instintivamente Hermione levantó la mirada hacia donde había visto a Draco, justo a tiempo de ver cómo algunos compañeros de mesa lo apuntaban con el dedo e incluso le lanzaban el profeta a la cara. La bruja negó con la cabeza indignada. Salió de su lugar dispuesta a acercarse al rubio, sin saber muy bien qué hacer o qué decirle cuando estuviera frente a frente, pero no fue necesario hacer nada. El rubio se alejó de golpe, poniéndose en pie mientras sus compañeros se reían a carcajadas.

Con un gruñido, él comenzó a alejarse a grandes zanjadas. La bruja se aproximó a los que aún se reían y negó con la cabeza, completamente desilusionada de ellos, que eran sus alumnos también.

Siguió caminando atrás del rubio, decidida a encontrarlo y otorgarle un poco de apoyo, o lo que fuera que pudiera hacer, no estaba muy segura de eso. Draco nunca había sido una persona muy amigable, y ahora aprecia serlo menos. Pero de todos modos, habían sido compañeros, sentía que no podía dejarlo solo.

Lo siguió de lejos, ya que no podía alcanzarlo, él caminaba rápido y no parecía notar nada a su alrededor, como habitualmente.

La bruja lo siguió un par de pasos más, pero lo perdió en cuanto él subió a una escalera y esta se movió, sin darle tiempo a Hermione de alcanzarlo. Cuando llegó a su destino Draco descendió y para cuando la muchacha de Gryffindor llegó al sitio, él ya no estaba.

***

Draco no apareció en las siguientes clases, y lo supo porque en la reunión de profesores que Hermione tuvo después, junto a todos los docentes, y la directora, era de lo único que se hablaba.

— hay que buscarlo, es un peligro para los otros alumnos. — dijo un docente, alzando su voz para hacerse oír por sobre las demás quejas.

— Vaya a saber dónde se escondió, conoce este lugar mejor que todos nosotros. — protesto otro, negando con la cabeza en señal de protesta.

— Al encontrarlo debemos regresarlo a Azkaban. — sugirió alguien más.

Hermione negó con la cabeza, mientras, sin poder evitar, miraba a todos incrédula. Muchos de los que estaban allí ese año eran nuevas incorporaciones al cuerpo docente. No le sorprendía que algunas brujas, como Rolanda Hooch negara con la cabeza, también en disconformidad con esos comentarios.

Prisionero  #6390 {Dramione} TERMINADAWhere stories live. Discover now