Prisionero #6390 {Dramione} TERMINADA

5 años despúes

5 años después

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El viaje por Europa estaba siendo incluso mejor de lo que se lo había imaginado. Daphne había incluido en la programación todo aquello que ella había solicitado, librerías, cafeterías, museos, galerías de arte, y nada podía complacerla más que eso. Habían estado programado ese viaje por cerca de un año, siempre como una mera idea hasta que de repente, ante el renovado interés de Astoria, habían organizado todo y en un mes estaban viajando: recorriendo Europa, las pequeñas ciudades olvidadas y las grandes menciones turísticas. Y debía admitirlo que era renovador.

Las hermanas Greengrass habían sido una constante en su vida por más de cinco años, desde que Astoria entró en su casa con una carta de Draco. La relación y el vínculo entre ellas se había ensanchado cuando tuvieron una idea que rápidamente pasaron del papel a la realidad con la ayuda de sus amigos. Neville y Theo estaban más que dispuestos a hacer realidad la ONG y hoy en día, con incorporación más que valiosas, como Bruno Mavs y otros tantos especialistas, eran reconocidos nacionalmente como una forma de integración bien sucedida. 

Al comienzo habían tenido dificultades económicas, pero luego de algunas donaciones anónimas, y una en particular, las cosa habían resultado más fáciles. Al menos en el sentido económico. Habían tenido mucho trabajo, tanto en base a estigma como a conseguir financiación. Habían ido a más galas benéficas de las que se había considerado apta para ir, pero había rendido buenos frutos. Su nombre usado junto a su título de heroína de guerra que tanto había desdeñado se mostraron de mucha utilidad, y saco todo el provecho de él. Cuando Harry se unió a la causa, dando un discurso bien armado por ella misma, de la importancia de ayudar y aceptar, las cosas decoloraron completamente.

No habían tenido vacaciones en casi cinco años, y Hermione había pasando de ser docente en salones de clase a ser co-fundadora de una de las ONG más importantes de todo el país. Daphne solía burlarse de ella aun por eso, pero Hermione ya entendía el humor oscuro de la bruja y no se sentía ofendida por ella o por sus bromas.

Pero a pesar de todo, a pesar de lo bien que le habían ido y de cuanto habían crecido en eso, aún había una sensación amarga en la boca de su estómago y en su pecho. Cada vez que pensaba en él era como una daga invisible clavada justo en su corazón. Dolía, pero con el tiempo había aprendido a ocultarlo. Incluso había logrado aceptar que Draco se había ido por su proprio bien. Había seguido con su vida, tal como él habría querido y como le había solicitado en su carta. Había luchado por lo que consideraba correcto, con uñas y dientes, tal como él había mencionado. Había encontrado en esa lucha su forma de estar viva y esperaba que él también lo hubiera hecho.

No había tenido más noticias de Draco. Sabía que Burno y Neville las tenían, pero rehusaba preguntar con miedo a la respuesta. No estaba segura de sentirme preparada para saber que se había casado, que estaba con alguien más; se contentaba al saber que él estaba bien. Por lo que sabía, su beca había sido bien sucedida e incluso le habían concedido un año más. Estaba feliz por él, triste por ellos.

Ella incluso había salido algunas veces en citas, generalmente a base de insistencia de Daphne, pero lo había hecho e incluso hubo alguien con quien estuvo por casi dos años, pero la vida se había encargado de demostrarles a ambos que no eran el uno para el otro y ambos siguieron sus caminos.

Mientras entraba en una de las pequeñas galerías de artes asignadas para la programación de ese día, Hermione no pudo evitar notar la belleza de los cuadros que había a su alrededor. Más de una artista exponía ese día, por lo que tenía entendido, pero las obras eran en el mismo padrón, pero muy diferentes. Había perfección en su tarea, pero también belleza en lo que transmitían. Los colores eran cálidos, reflejando una vida brillante y colorida. Se perdió en estos, dejando de escuchar las voces de Daphne y Astoria que charlaban y comentaban todo sin cesar.