Prisionero #6390 {Dramione} TERMINADA

14. Una disculpa y un gracias

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Una disculpa y un gracias

—¿Puedo-puedo pasar? — preguntó con cierta inseguridad la joven bruja. Apuntando con un dedo dentro. — se que Malfoy está ahí, y...

— ¿Cómo sabes eso? — cuestionó Hermione, y toda duda había desaparecido de su tono. Ahora hablaba con autoridad.

La joven pareció dudar pero entonces habló — Yo los seguí. Cuando lo sacaste del lago y... — la muchacha estaba nerviosa, movía las manos y su semblante estaba arrugado, pero ante la dura mirada que recibió de Hermione, se detuvo. — quería decirle que lo siento.

Hermione la quedó mirando por un segundo. Incrédula ante lo que estaba escuchando. Karla había estado cuando Draco caminaba sobre el hilo, ella misma la había visto, la joven Slytherin no había hecho nada. Y ahora se plantaba en su puerta para pedir disculpas.

No muy segura, se hizo a un lado para dejarla entrar. Draco estaba sentado en el sofá, su pelo aún húmedo, su mirada puesta en Karla, con incredulidad y algo de recelo.

La muchacha entró con pasos lentos. Le sostuvo la mirada al chico rubio hasta que no pudo más, y desvió la atención a Hermione. Está le hizo una señal para que se sentará en el sofá. Ella lo hizo a unos centímetros de Draco, que retrocedió instintivamente.

— Quería pedirte disculpas. — comenzó ella y espero a que él dijese algo, pero como no lo hizo, y tras darle una nueva mirada a su profesora, ella continuó. — al principio parecía divertido. Era solo una broma. Connor dijo que estaría bien. Pero luego llegó Hermione y nos asustamos, por eso Connor rompió el hielo para que cayeras...

—¿El rompió el hilo por gusto? — Hermione la interrumpió con fervor. Casi no daba créditos a lo que estaba escuchando. Se puso en pie, sin poder mantenerse sentada, los nervios y la frustración se lo impedían.

Karla asintió nerviosamente.

— Él sabe que no te podes defender. — hizo una señal con la mano hacia Draco, dónde sobresalía el brazalete mágico, y el rubio se apresuró a esconder su brazo. — todos corrimos pero me sentí muy mal y preocupada. ¿Qué iba a pasar si la señorita Granger no te sacaba del agua? — De pronto, sus ojos se llenaron de lágrimas. — Entonces me quedé para observar. Pensé en ayudar pero... no quería, no podía... estaba tan aterrada.

Hermione se apoyó en la mesada. Sus propias manos temblaban de rabia. Habían estado a punto de matar a alguien solamente por diversión.

— No queríamos que nada malo te pasará. Al principio era divertido, ¿Sabes? — se quitó las lágrimas con brusquedad. — cuando quemamos tus libros, y luego algunas de tus ropas...

Hermione estaba quedando cada vez más blanca. Miró a Draco, esperando una reacción por su parte. Pero su semblante estaba estoico, cómo si no estuviera escuchando o sintiendo nada.

— lLuego, cuando te fuiste de la casa de Slytherin realmente se sintió mal. Pero el profesor no mencionó nada, entonces no pareció tan malo. Y mis padres dicen... dicen... — Karla levantó la mirada para encontrar los ojos de Hermione. — dicen que te lo mereces.

— Eso es un abuso. ¿Se dan cuenta que podía haber muerto? — Hermione casi gritó, saliendo de su lugar y parándose al lado del rubio. — ¿Malfoy le ha hecho algo? — cuestionó.

La joven negó con la cabeza, más lagrimas bajando por sus mejillas. Pero él seguía quieto, tanto que Hermione comenzaba a dudar de si estaba realmente despierto.