𝐼𝑠 𝑡𝒉𝑒 𝑡𝑦𝑝𝑒 𝑜𝑓 | 𝚃𝚠𝚒𝚜𝚝𝚎𝚍 𝚆𝚘𝚗𝚍𝚎𝚛𝚕𝚊𝚗𝚍

𝐸𝑝𝑒𝑙 𝐹𝑒𝑙𝑚𝑖𝑒𝑟

ᴇs ᴇʟ ᴛɪᴘᴏ ᴅᴇ ᴘᴀɴᴅɪʟʟᴇʀᴏ ϙᴜᴇ́...
¿ᴇsᴛᴀ́s ʙɪᴇɴ? ʟᴀs ᴄᴀʟʟᴇs ɴᴏ sᴏɴ ᴘᴀʀᴀ ᴀʟɢᴜɪᴇɴ ᴄᴏ́ᴍᴏ ᴛᴜ́, ᴅᴇʙᴇʀɪ́ᴀs ᴛᴇɴᴇʀ ᴍᴀ́s ᴄᴜɪᴅᴀᴅᴏ

Las calles, siempre llegan a ser lugares sumamente inseguros para la gente despistada o los que deben transitar por ellas a altas horas de la noche.

Aunque, a cualquier hora del día puede ser peligroso.

—Maldita sea, ya es muy noche —caminaba a pasos acelerados mirando a todas partes cada cinco segundos. Su colonia no era una de las más seguras y estar a altas horas de la noche no era una buena elección para transitar esas desoladas calles—. Me van a robar —suspiro asustado mirando por última vez si nadie lo seguía—. Tranquilo, con tu físico nadie se metería contigo. De un golpe los noqueas... ¿¡A quién engaño!? Me van a navajear —ahogo su grito con pánico observando como un par se acercaba de manera sospechosa.

Suspiro intentando relajarse y verse lo mas normal posible, no quería que esos posibles asaltantes se dieran cuenta del terror que lo agobiada al solo verlos pasar cerca suyo. Parándose lo mas derecho posible, sacando pecho en un desesperado intento de intimidar a los delincuentes que se acercaban con una sola cosa en mente, despojarlo de todas sus pertenecías.

—Mira lo que nos trajo la corriente, Floyd —un alto chico con relajada mirada miraba desde arriba al chico que apenas escucho su voz se contrajo de miedo. Pobre chico, ya estaba rezando internamente y eso que era ateo.

—Eh~ Al parecer camaroncito se durmió y termino en estos barrios —se acerco al rostro del contrario chocando frentes, una intimidante sonrisa le brindaba aumentando mas su miedo—. Se ve que es uno de los camaroncitos dorados~.

—Hm~ Puede ser —imito la sonrisa de su gemelo logrando que el alma se saliera del cuerpo del contrario.

—O n-no, sol-lo voy a mi h-hogar —contesto con dificultad, sus nervios ya lo estaban traicionando.

—Oya~ Deberíamos escoltar a nuestro vecino, ¿No, Floyd? 

—¡Claro! Cualquier pez podría comerse a camaroncito —abrazo por el cuello a su gemelo sin alejar esa intimidante mirada al pelinegro que temblaba como esos perros mexicanos.

Ambos chicos comenzaron a caminar junto a su victima al primer callejón que encontraron para poderlo asaltar sin ningún inconveniente, pero había un pequeño detalle que arruinaría sus planes.

—Eso es muy injusto —una suave voz sonó detrás de los gemelos quienes tenían arrinconado al pelinegro—. Dos contra uno, que cobardes —todas las miradas se posaron en esa voz encontrándose con un delgado chico de cabellera lila con unos auriculares adornando su cuello.

 —¿Eh?~ Este niño es muy valiente, Jade —ambos gemelos quitaron su atención de su victima para fijarse en ese "héroe" que se atrevía a molestarlos. El contrario ya se encontraba llorando imaginándose lo peor, sentía que aquel chico que intentaba ayudarlo terminaría muerto de la paliza que esos dos le puedan brindar.

—¡Chico huye, te mataran aquí! —grito desesperado intentando salvar a un inocente, no deseaba tener en su mente una escena de un muerto.

—¿De que hablas? Los que morirán aquí, serán ellos —contesto tan confiado asustando por milisegundos a sus oponentes—. Vamos~ Que esperan anguilas.

En un cerrar y abrir de ojos, los tres pandilleros ya se encontraban peleando a puño limpio, para su sorpresa la pelea se veía muy pareja por la agilidad y velocidad del mas bajo complicando a los mas altos golpearlo, pero seguía teniendo una desventaja, el era uno.

De un momento a otro uno de los gemelos atrapo el cuerpo del mas bajo dejándolo a la merced del gemelo mas sádico, quien tenia en sus manos un tubo de metal dispuesto a golpear sin compasión al indefenso chico. 

Era obvio que no dejaría que mataran a su salvador, por lo que se armo de valor para lanzarse encima del chico y evitar que golpeara con aquel tubo al mas bajo. El gemelo quedo desarmado, pero eso no quito que cambiara de objetivo y se centrara en eliminar al entrometido chico, si tan solo no se hubiera metido no estaría siendo golpeado sin compasión en el rostro.

Los golpeas comenzaban a ser mas violentos haciéndolo sangrar sin piedad, no dejaba ni que tuviera un respiro de la golpiza que le estaba dando, por unos momentos pensaba que así seria su ultimo día, murió intentando salvar alguien... Una manera honorable de hacerlo.

Estando en lo ultimo que le quedaba de conciencia sintió que los golpes habían cesado, como pudo abrió los ojos encontrándose al peli lila con el labio sangrando y el tubo en sus manos manchado de sangre, una aterradora imagen para el chico.

—Gracias por ayudarme —jadeaba recuperando el aire que había perdido en intentar librarse del gemelo mayor—. Uh~ Te dejaron hecho mierda —dio una risa al aire regresando a sus sentidos al chico con la cara casi desfigurada.

—Que rara manera de agradecerme por salvar tu vida —rio con dificultad escupiendo algunos dientes que le fueron tirados.

—Te llevo a tu casa —se agacho a la altura del chico tumbado en el suelo—. Ven —extendió su mano a su contrario esperando que la tomara.

—Espero y no me asaltes tu —con dificultad tomo la mano del chico quien dejo escapar algunas carcajadas.

—No, yo no le robo a la gente que vive en mi colonia.

Una bonita amistad se formo después de un intento de asalto donde le dieron la paliza de su vida a uno de ellos, en fin, cosas de barrios pesados.

Medio mamado nuestro protagonista y le partieron su madre jsjsjsjsj.

Referencia vergas a "Camaron que se duerme se lo lleva la corriente"

Tokyo Revengers me estaba afectando y para acabarla ésto se escribió con la canción de 'Perros salvajes' de fondo.