IV

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HyeJu esperaba impaciente a que la puerta se abriera.

Su dueña se había marchado hacia unas horas y no había regresado.

Movía su pie con impaciencia, mirando el reloj en la pared , no sabía leer los relojes de aguja, pero podía mirar la aguja que marcaba los segundos, dando un paso tras otro en círculos, mostrando el tiempo avanzar  con rapidez.

El sol se fue, vió el cielo teñirse de rosas y naranjas, con preocupación.

Cuando el cielo pasó a ser de azules cada vez más oscuros, y su dueña seguía sin volver, HyeJu bajó las orejas, triste.

El cielo se tiñó de completo negro, y los punto de luz que HeeJin le había llamado estrellas aparecieron uno por uno.

Y su dueña no volvía.

HyeJu quiso llorar, pero recordó que HeeJin le decía que ella no era ninguna gata llorona y se contuvo.

Continúo pasando el tiempo, y unas cuantas horas después del atardecer la puerta se abrió, HyeJu sintió el olor de su dueña, y se apresuró a ir hacia ella.

HeeJin alzó una mano antes de que HyeJu pudiera comenzar a frotarse en ella.

La rubia señaló su otra mano, que descansaba sobre su pecho dentro de un pañuelo, atado a su cuello.

— Me torcí la muñeca, tuve que ir al hospital y-

Se detuvo cuando escuchó a HyeJu sorber su nariz, notando las lágrimas en el rostro de su gatita.

— Oh, no, Junnie, no llores— HeeJin llevó su mano libre al rostro de la híbrida, acariciando su mejilla—. Fue algo muy estúpido, salía de comprarte unas galletas y me tropecé, caí mal y-

— Es que doy mala suerte— murmuró.

— ¿Qué? No, no tienes la culpa.

— ¡Sí, HeeJinnie! — objetó —. Ibas a comprar algo para mí y pasó esto, es mí culpa— hizo un mohín.

— Que no es tu culpa y no das mala suerte, gatita— HeeJin habló con seriedad, sostuvo el mentón de HyeJu para dejar un rápido beso en los finos y rosados labios de la híbrida, haciendo que esta se ruborizara.

☁𝓑𝓪𝓭 𝓛𝓾𝓬𝓴☁ 𝙷𝚎𝚎𝙷𝚢𝚎Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt