LXXXVIII

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Al cuarto día de estar ambas encerradas en el departamento, la comida ya empezaba a escasear, y HeeJin tuvo que dejar sola a HyeJu en casa mientras ella iba a hacer las compras.

— Tardaré una hora como mucho, voy a comprar varias cosas para que no tenga que salir de nuevo, por ahora.

Le daba pánico dejar a HyeJu sola, por más que sea pocos minutos, como cuando iba a sacar la basura, y casi se veía corriendo por el supermercado buscando las cosas para ser más rápida y regresar pronto.

HyeJu permanecía calmada, y sólo la miró y asintió, HeeJin dejó muchos besos en su rostro hasta que la híbrida tuvo que apartarla.

— Voy a estar bien— dijo mientras sonreía—. Mientras más rápido te vayas, más rápido regresarás, vé.

HeeJin dejó un último beso en su frente.

— No salgas de aquí— murmuró, antes de separarse finalmente de ella, tomando su abrigo, revisando que tenía su billetera, dió una última mirada a su novia, que ya era una garita negra que se iba hacia el sillón a dormir.

La rubia sonrió y finalmente cerró la puerta detrás de ella.

🐾

Jinsoul no podía decir que las cosas se habían recuperado un poco desde que había regresado, sus novias se mostraban algo distantes con ella, no querían jugar y su nuevo pasatiempo era permanecer tristes y abrazadas ellas dos solas.

Y como todo la adulta madura que era, se quedaba en la cocina comiendo cualquier comida basura que había comprado ese día (porque no duraba más de un día) y así era como en ese momento estaba terminando un paquete de papas fritas sabor queso mientras se lamentaba por su soledad.

— ¿Será una indirecta de que quieren terminar conmigo? — se preguntó a sí misma, hablando bajo, y miró las papas con algo de tristeza—. Que mierda... — murmuró, sintiendo su corazón doler.

No sabía por qué estaban distanciadas, quizás porque sus pequeñas estaban algo molestas que les haya ocultado la muerte de su amiga con un "se fue de viaje".

— Sí, de viaje al cielo... — masculló.

En un principio parecía que estaban bien, pero pasaron los días y las escuchó decir que extrañaban a su amiga, a la pequeña pantera, y luego recordando que no volvería, se dejaban consolar sólo con la otra, y apartaban a Jinsoul o simplemente la ignoraban, así que la humana sólo se había quedado afuera.

Su depresión fue interrumpida por una llamada a su celular, un tono específico que no había escuchado en días.

— ¿HeeJin? ¿Sigues viva?

Jinsoul, sí... Y, bueno, ¿Podrías venir a buscarme?

Jinsoul alzó las cejas.

— ¿Qué mierda hiciste? ¿Dónde estás?

Estoy en la comisaría, la de policía, la que queda cerca de casa...

— Jeon, ¿Qué hiciste?

Fue una... Pelea callejera, luego te explico.

Jinsoul suspiró dejó sus papas, y fue hacia la sala, tomando su abrigo.

— Ya estoy saliendo, ¿Algo más?

¿Me pagas la fianza?

— ¡Jeon!

¿Para qué tengo a una amiga multimillonaria, Jung?

— Para que te parta la cara a golpes por idiota, adiós, espérame— soltó cansada, era el colmo de toda mejor amiga.

🐾

HyeJu despertó bastante tarde de su siesta, se estiró y bostezó en forma de gato, antes de ver el reloj, viendo las agujas mucho más lejos de donde estaban antes.

Cambió a su forma humana y caminó por el silencioso departamento.

— ¿HeeJin?

Fue hacia el cuarto, al baño, hasta la cocina, pero no había nadie.

Abrió la heladera, si había al menos comida nueva era porque HeeJin había vuelto, quizás se había olvidado de algo y haya tenido que salir de nuevo.

—Igual... — murmuró—. Vacía.

Buscó bolsas, el abrigo de su humana, pero nada, no había señales de que su novia había vuelto.

Sintió sus manos temblar, estaba preocupada, y no lo pensó del todo cuando fue hacia la puerta, abriéndola y asomando su cabeza al exterior.

— ¿HeeJin? — llamó de nuevo, más fuerte, pero no había señales de vida de nadie, la oscuridad del pasillo la hizo temblar de miedo.

Abrió más la puerta y salió del departamento, mirando alrededor, las demás puertas cerradas y el final del pasillo, que daba a un patio y las escaleras que iban hacia la calle.

Sus orejas bajaron de golpe cuando recordó que no podía salir del departamento, iba a retroceder, cuando una mano cubrió su boca, haciendo que diera un respingo y su grito fuera tapado.

Un brazo rodeó su cintura y fue tirada hacia atrás, su espalda golpeó contra el pecho de una persona y sus ojos se abrieron con pánico, comenzó a patear pero aquel desconocido la seguía sosteniendo con fuerza.

Contra todo lo que pasaba, fue llevada de nuevo hacia el interior del departamento, y escuchó a aquel desconocido hablar por primera vez, mientras aún cubría su boca y su mano se apoyaba en el picaporte de la puerta.

—DivaBoo, ya entra.

Y sólo cerró cuando una ardilla entro dando saltos al departamento.

☁𝓑𝓪𝓭 𝓛𝓾𝓬𝓴☁ 𝙷𝚎𝚎𝙷𝚢𝚎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora