XLV

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🌚

HeeJin se estiró cómodamente en su cama, miró a la linda gatita somnolienta a su lado, HyeJu se frotaba los ojitos con cansancio.

— Buenos días, HyeHye— dijo la rubia, a lo que la gatita respondió con un ruido cansado—. ¿Dessyunamos juntas?

HyeJu asintió con cansancio.

— ¿Puedo desayunar en la cama? — preguntó, sus ojitos se abrieron un poco, sus largas y oscuras pestañas se ajitaron.

— Por supuesto, bebé— dijo HeeJin, besó su nariz sin poder resistirse.

La rubia se levantó, yendo a la cocina, tomando dos tazas, preparó primero el desayuno de HyeJu, su leche especial para gatos e híbridos (ya que la leche normal le caía mal) con dos cucharadas de azúcar, calentada un minuto en el microondas para que estuviera cómodamente tibia.

HeeJin regresó al cuarto para darle su desayuno.

HyeJu estaba sentada en la cama y se veía extrañamente ruborizada y parecía pensativa.

— Junnie, aquí está tu leche.

No fue sinó que HeeJin habló que la gatita se dió cuenta de la presencia en su habitación, sus orejitas se alzaron con sorpresa.

— G-Gracias— murmuró, tomando la taza entre sus manos.

— ¿Estás bien?

HyeJu asintió, aunque no convenció a HeeJin.

La rubia la dejó, sin querer preguntarle qué pasaba, volvió a la cocina, a preparar su desayuno y sus cosas de la universidad.

Ese día era muy importante porque entregarían el trabajo que había hecho con Sooyoung, más una presentación oral donde tendría que explicarle al profesor qué habían aprendido de todo lo investigado.

Repasaba el trabajo, con murmullos, mientras tomaba lo que quedaba de su capuchino.

¡Miau~~! ¡Hee-Jin! ¡Miau!

Los maullidos desesperados de HyeJu la hicieron dejar todo aquello y correr hacia el cuarto, preocupada.

— ¡Hye! ¿Qué-?

Se detuvo bruscamente, HyeJu temblaba, echa una bolita en el suelo cerca a la puerta, abrazaba a sus piernas y se escuchaban sollozos y maullidos, cada tanto, murmuraba el nombre de su humana.

— ¿Junnie?

Escuchaba sus respiraciones agitadas y se asustó, sin saber qué ocurría.

La rubia se sentó frente a ella, acariciando su cabello y sus orejas con cariño, HyeJu mordía su labio inferior con fuerza y sorbía su nariz.

— ¿Qué pasa, bebé? Me estás preocupando.

— HeeJinnie... E-Estoy mo-mojada.

HeeJin abrió ampliamente sus ojos, no creía haber escuchado bien.

— ¿Qué?

HyeJu alzó sus ojos tímidamente dejó de abrazar sus piernas para abrirlas, mostrando lo que decía a HeeJin.

Tanto HyeJu como HeeJin dormían sólo en ropa interior y con una remera liviana por el calor de la estación, y nada de aquello disimulaba un poco la mancha que tenía la híbrida.

HeeJin alzó sus cejas, sorprendida.

Se distinguía perfectamente la parte intima de su híbrida, húmeda debajo de la fina tela de la ropa interior.

— D-Duele— lloriqueó—. H-HeeJin... A-yúdame... Miau~

HeeJin comenzó a sentir calor, respiró de forma agitada.

Con pánico, se apartó de la gatita y salió del cuarto, cerrando la puerta con fuerza.

HyeJu volvió a maullar, llamándola de forma desesperada, por más que le partía el corazón, no quería hacerle mal.

Tomó su teléfono, marcando a la persona más indicada para ayudarla.

[...]

Pido perdón por no actualizar, pero se me complica demasiado cambiar algunas partes de la historia, porque, como ya he mencionado, la historia es JimSu, y bueno, ya saben.

(Perdón si no quedo tan bien, pero trate de hacer lo mejor posible cambiando algunas partes)

☁𝓑𝓪𝓭 𝓛𝓾𝓬𝓴☁ 𝙷𝚎𝚎𝙷𝚢𝚎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora