Oh barrotes!
Fríos, tan fríos cómo tus manos cuando soltaron las mías.
Delgados cómo tus lindos labios.
Pero fuertes cómo la espada que clavaste en mi costado, el día que me traicionaste.
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– Entonces ¿Cuál es el siguiente paso? — se sienta con ella para desayunar
– He estado pensando y llegué a la conclusión de que alguien más estuvo moviendo los hilos en nuestra contra
– Alguien que preparó todos esos ataques en mi contra fingiendo ser tú
– Sabía que iba a fugarme, también que estaba siendo en extremo precavida para no llamar tu atención, intento crear una guerra entre nosotros
– ¿Esa persona esperaba que te hundiera?
– Por supuesto, si yo lograba salir de la cárcel, me iba a tomar unos meses regresar a mis negocios. No le conviene que vuelva
– Entonces intento distraerte con mi presencia ¿Pero por qué?
– Me amenazaste con quitarme a la niña ¿Recuerdas? El plan que tenía era estar lo más lejos posible de ti para evitarlo, ni de chiste te la vas a llevar y eso te lo estoy avisando desde ahora
– Cuando te amenace estaba enojado por todo lo que supuestamente estuviste haciendo contra mí, no voy a quitartela, ambos vamos a compartir la custodia ¿Oíste? Vamos a compartir
– Compartir, tú no sabes lo que es eso
– ¿Y tú si?
– He compartido mi dinero con Regina, que no ha echo nada de su vida, he pagado todo lo que Isabela llego a necesitar desde que nació, he compartido marido y un "novio". Sé lo que es compartir
– Le haz echado en cara a Regina todo lo que "compartiste" con ella, quisiste manejar la vida de Isabela por esa misma razón y compartiste marido porque ni siquiera lo querías, eliminaste de la ecuación a Jimena que era la verdadera novia del imbécil ese y luego quisiste eliminar a tu hija. Tú no sabes compartir
– Bueno es obvio que no soy alguien que comparte al cien por ciento — asiente dándole la razón — Pero puedo llegar a compartir, tú ni siquiera eso
– No te creo, así que haremos de nuestra tregua un contrato, es lo único que tú respetas realmente
– ¿Y de que me sirve? Tú no respetas absolutamente nada
– No es verdad, si me eres leal lo seré también, te traicione porque tú no eras leal conmigo, habíamos acordado que tendría una participación bastante grande si te daba mis contactos, te los llevaste y me hiciste jugar el papel de tonto, debiste ver llegar que te traicionaria
– Bien, voy a ser la adulta y no sacaré a la luz todo lo que tengo ganas de decirte ahora. Haremos ese contrato pero me llegas a tan siquiera intentar ver la cara Luís y prometo que te causare un infarto del coraje
– Ten cuidado con eso porque ya tuve un mini infarto, recuerda que si dejas a Aliyah sin padre luego tendrás yernos del doble de su edad
– Ninguno se va atrever presentarse ante mí, puedo deshacerme de ellos bien fácil y eso es del conocimiento público
