¡Ningún Rastro!.

418 58 160
                                    

– Aliyah — sonríe tomando su manita — Vas a ser buena y no harás berrinches ¿Si? Volveré pronto por las dos, le vas hacer compañía a Mónica para que no piense en esa herida, te amo — se inclina para dejar un beso sobre su frente — Prometo que lueg...

Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.

– Aliyah — sonríe tomando su manita — Vas a ser buena y no harás berrinches ¿Si? Volveré pronto por las dos, le vas hacer compañía a Mónica para que no piense en esa herida, te amo — se inclina para dejar un beso sobre su frente — Prometo que luego de todo esto, las cosas van a mejorar





Se quito el brazalete y lo agitó un poco para llamar su atención, como tenía brillos cayó enseguida en la distracción, lo dejo en sus manitas y sin hacer tanto ruido salió con el arma en mano, hacer esto le causó uno de los dolores más grandes que ya sintió en el pecho, se repetía una tras otra que no debía mirar atrás pero el miedo de ya no regresar era tanto que la vista se le nublaba por las lágrimas retenidas.

Tomo una gran bocanada de aire para luego seguir su camino, no sin antes dejar su rastro por ahí, así Mónica y Aliyah estarían a salvo, cansada por la gran subida se detuvo unos instantes recargada en un árbol, calmó su respiración lo suficiente como para escuchar lo que pasaba a su alrededor, no muy lejos de allí un grupo pequeño acompañaba al tar Alvaro, ellos estaban tras el rastro de que dejó Altagracia pero otro grupo se encargaba de localizar a Mónica y la bebé, en caso de que ella se resistiera podría doblegarla si amenazaba a sus hijas.


<<>><<>><<>><<>><<>><<>><<>><<>><<



Desde ayer cuando Altagracia no regreso a casa las cosas se pusieron tensas, Matamoros tuvo que lidiar con José Luís y Saúl más la policía, después del secuestro no tardaron mucho en reportar los cuerpos de los guardias que asesinaron para llevárselas, por supuesto luego todo el mundo estaba en la casa expectantes por una llamada para cuadrar el rescaté, sólo que eso no paso. La policía comenzó a seguir pistas falsas que Matamoros había mandado colocar para sacarlos de la casa pero aún así tenía a los otros dos ahí encima.

Por fortuna cuando Altagracia dio señales de vida pudo responder en privado, no iba a llevarse a esos dos al rescaté, Saúl echaría de cabeza a todos cuando viera la masacre, Navarrete no es para nada lógico en este tipo de situaciones y no es para menos, la vida de su hija estaba en juego. Así que simplemente los dejo solos en la casa para que lidiaran con la presencia del otro, mientras tanto ya el grupo de guardias enviado la noche anterior se encontraba siguiendo la señal que emitía el celular, no tardaron demasiado en encontrarlas, al principio Mónica no confío en ellos.

Pero por suerte Matamoros apareció justo antes de que ella intentará herir a alguien, le pidió que fuera con tres de ellos hasta abajo donde se encontraba la camioneta, allí podrían limpiarle la herida y vendarsela, además de que cuidarian de ambas, le preguntó hacía que dirección fue Altagracia para luego correr seguido de varios guardias bien armados, sabía que lo del rastro fue dejado intencionalmente pero justo cuando comenzaba a sentirse perdido, escuchó no muy lejos de allí disparos; con el corazón latiendole a mil por hora no lo pensó dos veces para ir en esa dirección.



Barrotes De AceroTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon