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La mamá de Jeonghan no es bonita. No es que no sea bonita físicamente, es que ella no sonríe, bueno, si lo hace, pero no a Jeonghan, y Dino quiere que le sonría a Jeonghan. De hecho, Dino quiere que también le sonría a él porque no entiende porque la mamá de Jeonghan es tan rara. No parece una buena mamá. Bien, Dino no sabe como es una buena mamá, la mamá que Dino tuvo murió cuando él era un bebé, así que no sabe mucho de mamás porque tiene dos papás, pero está seguro de que una mamá no debería ser como la mamá de Jeonghan, una mamá que pone incomoda a su hijo.

Jeonghan lo carga como si Dino no pudiera caminar, lo lleva en sus brazos mientras le sonríe a las mujeres allí, hay muchas mujeres, y muchos niños, y los niños juegan alrededor y Dino tiene curiosidad, pero Jeonghan no lo suelta, no lo baja de sus brazos e incluso cuando se sienta en los sillones raros y feos no lo deja bajar. Pero Jeonghan sonríe incómodo y se ríe, y parece querer irse.

Seungcheol no está porque Seungcheol no fue invitado, o eso dice Jeonghan, aunque Jeonghan también dijo que tampoco fue invitado, esta señora solo llegó a su casa y les dijo que irían a una reunión, y ellos están allí, en la reunión, con muchas mujeres y con muchos niños que Dino solo ve.

—Bájalo, Jeonghan, deja que juegue con los demás niños.

Jeonghan solo lo baja entonces, como si la voz fuerte de su mamá fuera una orden. Dino mira a Jeonghan por un largo tiempo, y se sienta a su lado, cree que dejar a Jeonghan ahora sería muy feo de su parte, Jeonghan siempre se queda con él cuando tiene miedo o algo no le gusta. Así que debe quedarse igual.

—Que lindo, entonces si te quiere.— Dice una de las mujeres. —Es que lo criaste desde pequeño ¿verdad? ¿y no extraña a su mamá?

—La visitamos una vez a la semana.— Responde Jeonghan. —Bueno, la tumba, no a ella... si a ella, pero también a la tumba...

Si Jeonghan tartamudea y se equivoca está nervioso, Dino lo sabe porque papá se lo dijo. Antes de que Dino pueda decir algo un niño más pequeño aparece y lo toma de la mano señalando una pared junto a otros niños, y Dino no quiere ir, pero hay colores, y los colores son sus nuevos amigos así que sigue al niño dejando a Jeonghan allí. Quizás no debe hacerlo pero quiere el color amarillo, le gusta el amarillo.

—Umm... ¿y que pasó con tu universidad? ¿si la dejaste?— Escucha a sus espaldas mientras que le pide amablemente el color amarillo a uno de los niños, se lo dan y Dino comienza a buscar una hoja. Jeonghan dice que las paredes no se rayan a menos de que peguen las hojas en la pared para dibujar, pero ahora no puede pegar las hojas así que dibujara en el suelo, sobre las hojas. —¿y Seungcheol?

—Mira, que cómodo dejarte a su hijo para que tu lo cuides.— Escucha la mamá de Jeonghan. —Por eso te dije, si fuera tuyo al menos tendría sentido, y ni tanto, estarías trabajando, pero quieres jugar a ser la esposa.

—Dino es mi hijo y no estoy jugando a ser la esposa. Seungcheol es mi novio y acordamos que yo cuidaba de Dino y él cuidaba que no muriéramos de hambre, fue un acuerdo.

—Mamá, ya deja a Jeonghan, es la primera vez que se reúne con nosotras despues de tanto.

—Vino porque yo fui por él.

—Cierto, me sacó de mi departamento con mi hijo, podría demandar.

—Ah, al menos sigue bromeando.— Dino gira con curiosidad mientras que dibuja en el papel. Un niño toma de su mano el color amarillo y él lo deja mientras que mira al montón de señoras que hablan. —Ya, es bueno que Dino conozca a sus primos. Ojala hubiera podido venir Seungcheol.

—Está trabajando.— Jeonghan parece un poco apagado y Dino recibe de vuelta su color, continua dibujando con el amarillo.

—¿me pestas amarillo?— Pregunta un niño pequeño y Dino le da el color amarillo, él continua con el azul porque también le gusta ese color.

Está dibujando una flor, porque son bonitas y porque es lo único que puede dibujar ¡Jeonghan le dibuja dinosaurios a veces! Quizás deba decirle a Jeonghan que le dibuje un dinosaurio, solo que un poco más tarde, cuando deje de hablar con el montón de señoras. Obtiene de nuevo el color amarillo y sigue con su dibujo, ya no escucha nada, asi que sigue ignorándolo mientras que los demás niños también dibujan.

Alza el rostro con curiosidad cuando la mamá de Jeonghan se acerca, ella los mira a todos y despues abre los ojos con sorpresa.

—¡Rayando la pared!— Ella exclama. —¡Eso no se hace!

Quizás es porque Dino está más cerca, no lo sabe, pero ella toma su pequeña mano que sostenía el color amarillo y le da un golpe allí. Le pega. Y Dino no sabe que hacer o pensar. Nunca le habían pegado, al menos no un adulto, siempre ve que otros niños se pegan entre si, pero nunca adultos. Y se siente raro.

Es buen momento para llorar.

Antes de que pueda soltar una lagrima Jeonghan lo alza del suelo y lo aparta, mira a su madre y parece molesto.

—Si no te disculpas con Dino nos iremos.— Dice Jeonghan. —Podemos limpiar las paredes pero no puedes pegarle a Dino.

—Fue solo un golpecito, ni siquiera le dolió, los niños de ahora son demasiado frágiles. Piensan que con un golpecito se van a romper, pero mírate, tú sigues aquí y estás bien.

Jeonghan parece tan enojado que Dino no se atreve a decirle que está pisando su dibujo. Jeonghan no dice nada y solo se gira y se van, Dino no puede dejar de ver a los otros niños que lloran porque sus mamás los regañaron, quizás Dino deba llorar porque Jeonghan va a regañarlo, aunque Dino no haya hecho nada, aun se siente confundido por el golpecito en su mano.

Cuando llegan al auto Jeonghan lo sienta y se sienta a un lado, olvidándose de que alguien tiene que manejar. Dino lo mira.

—¿tu mamá te pegaba? Jeonghan.

Jeonghan lo mira a él.

—A veces. ¿Quieres ir a molestar a Seungcheol a su oficina?

—Sip. ¿podemos ir?

—Sip.


Adorable, lindo y tierno. [Seventeen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora