N U E V E

185 25 0
                                    

Abigail

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Abigail.

Los hechos vividos recientemente habían sido los más raros de mi vida.

Ver cómo todo estaba congelado a mi alrededor mientras tenía la oportunidad de hablar con un ángel se había sentido como ser parte de una película fantástica, o más bien de terror, sin embargo, no podía mentir y decir que no había disfrutado cada momento de ello.

Busqué rápidamente todo por lo que había ido al coche, tanto mi móvil como una chaqueta y luego salí de allí con la esperanza de ver a Nathaniel en algún lugar cercano, pero él ya no estaba allí. Solté un suspiro y deslicé la prenda de ropa por mis hombros, protegiéndome del frío, para así caminar nuevamente en dirección a la fiesta.

¿Alguna vez han sentido esa euforia inexplicable que podría hacerte gritar por horas?

Así me sentía justo ahora.

Ingresé a la casa por segunda vez durante la noche, con la diferencia de que ahora un nuevo sentimiento se albergaba en mi corazón y estaba por hacerme explotar.

Emoción.

Estaba emocionada por ver a donde iríamos a partir de ahora, ansiosa por descubrir si ahora que sabía la verdad podría ver a Nathaniel durante más tiempo, si podría detener el tiempo cuando lo necesitara y si podría hacerse visible para mis amigas y así poder disfrutar alguna vez como dos personas normales.

O al menos como una persona y un ángel normal.

Busqué con la mirada a Jane entre la multitud y caminé hasta ella rápidamente, sabiendo que era la persona indicada para este momento, en donde solo quería botar toda la adrenalina acumulada que había en mi cuerpo. Ella capturó mis manos con las suyas en el segundo en que me encontré a su lado y me pegó a su cuerpo para balancearse junto a mí.

— ¿A dónde has ido? –Murmuró ella con una sonrisa mientras elevaba nuestras manos unidas como un puño al aire por la euforia de la fiesta. – has desaparecido por algunos minutos.

¿Minutos? Lo había sentido como horas.

— He ido al coche por mi móvil. –Medio grité para que pudiera escucharme. - ¿Has visto a Anne? –Pregunté con curiosidad. –

— Esta por allí. –Dijo e indicó con su mirada un extremo cercano al nuestro, en donde estaba mi hermana con un chico lo bastante guapo como para ser una posible conquista. – al parecer no le va nada mal esta noche.

— Jesús, que astuta ha salido. –Una carcajada escapó de mis labios. - ¿Lleva mucho tiempo con él?

— No, hace unos minutos había dicho que se iría en cuanto regresaras. –Mencionó Jane con una ceja alzada en forma pícara, lo que me hizo sonreír. – pero al aparecer encontró una nueva entretención. –Dijo y asentí, hasta que escuché como una nueva canción sonaba por los altavoces de la fraternidad. –

When I fallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora