Almas Gemelas - Kookmin

▪️13▪️

El primer recreo fue el momento que Jimin consideró el más adecuado. Tomó la mano de Yoongi y lo llevó al lugar más apartado que pudo encontrar en el patio del colegio. 

El rubio se imaginó que si su compañero buscaba privacidad debía ser buena señal. Quizás de una buena vez se iba a animar a darle un beso ya que la noche anterior otra vez volvió a poner excusa para ir a su casa y pasar tiempo juntos. Había tenido tantas esperanzas las cuales se habían venido abajo en un instante. Entendía que Jimin era nuevo en todo esto de estar con chicos pero no lograba entender a qué le tenía tanto miedo. En su opinión estaba teniéndole ya demasiada paciencia. ¿Cuánto más iba a tener que esperar para tener algo de acción con el chico nuevo?

— Me gusta tu maquillaje hoy ¿no te lo dije ya? Estás bonito — le coqueteó mientras Jimin juntaba valor para decir lo que quería decir desde ayer. 

— Ah, gracias, yo…

— Fue una lástima que no pudiste venir anoche a casa — lo interrumpió. —  La hubiéramos pasado muy bien — Yoongi se acercó más a Jimin quien estaba contra una pared y lo acorraló un poquito. Tomó sus dos manos y le sonrió. — Quizás puedas compensarme ahora por dejarme plantado.

— Uh, lo siento. Es que…en realidad te quería hablar de algo importante — le dijo Jimin y soltó sus manos de las del contrario. — No creo poder seguir saliendo contigo de esa manera — confesó finalmente. 

— ¿Qué? ¿Por qué no?

— Pues…porque me di cuenta que es mejor que seamos solo amigos. 

— ¿Por qué? — insistió sorprendido Yoongi. Esto no era para nada lo que había tenido en mente que sucedería. — Creí que yo te gustaba. 

— Sí, me gustas. Realmente me agradas pero…ya sabes cómo soy de miedoso y lento. Siento que te estoy haciendo perder el tiempo — le contó bastante apenado. 

— Oye, no, no digas eso, bonito — el rubio sujetó y acarició su rostro con una mano. — Yo entiendo perfectamente que esta es tu primera vez conociendo a alguien. 

— De todos modos, tú…debes querer conocer otros chicos ¿no? Más divertidos y con más experiencia que yo. 

— Claro que no — negó Yoongi. — Tú eres el único chico que me gusta. El único con el que me interesa estar.

Jimin se sorprendió y se sintió completamente decepcionado por ese comentario. Le estaba mintiendo. ¿Por qué era así? ¿Qué le costaba ser honesto? Él no se enojaría si le dijera que prefería salir con otros chicos, pero sí le molestaba la mentira. Que le dijera que él era único cuando en ese video se notó perfectamente que no era así. 

— Perdón, pero estuve pensando y decidí que es mejor solo una amistad — decidió ponerse firme y apartó la mano del chico de su rostro. 

— No entiendo. Estuve llevándote a citas, dándote espacio. Jamás te apuré a hacer nada que no querías — replicó Yoongi. 

— Ya sé, y fue lindo y la pasé bien pero creo que tú y yo pretendemos cosas diferentes.

— Claro que no. Estamos en la misma página. ¿Sabes qué? Creo que solo estás asustado. Te asusta lo que te pasa conmigo. Está bien, bonito — volvió a acercarse a Jimin y esta vez lo sujetó de su cuello con ambas manos. — Creo que no estuve demostrándote bien lo mucho que me gustas. Quizás fue mi error, y lo siento. 

— No, no es así. Yo… — Jimin se estaba poniendo muy incómodo. Yoongi no parecía querer soltarlo. 

— Solo déjame darte un beso. Déjame mostrarte que esto no tiene nada de malo. Vas a ver. Solo necesitas animarte.