«Lovefool»; Gojo Satoru

19.

Escuché la puerta cerrarse. Inmediatamente, salí de mi habitación para observar que se adentraba cada vez más a la casa. En ese momento, mi sonrisa se mostró en mis labios.

— ¡Papá! — exclamé emocionada. Salí corriendo de mi habitación para que me tomara y me cargara en brazos.

Él me esperaba de cuclillas. Al estar cerca de él, me cubrió con sus musculosos brazos todo mi pequeño cuerpo.

— ¿Cómo está la princesa más hermosa del mundo? — preguntó divertido. Sonreí ampliamente.

— ¡Bien! — respondí — ¡Bienvenido a casa!

— Estaba ansioso por salir. Ya quería pasar tiempo contigo y tu mamá — me separé de él para verlo. Me gustaba cuando sonreía porque así me sentía protegida.

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— Papá, no le entiendo a la tarea. ¿Me podrías ayudar?

— Claro, princesa. Ven.

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Miré a mi padre, estaba aterrado. Mi mamá estaba sorprendida. Yo estaba asustada.

Me repetía la misma pregunta cada segundo dentro de mi cabeza: ¿Qué es esto?

Formé una flor de cristal con un movimiento de mis manos. Ni yo sé cómo lo hice.

— Pa...

— NO, ALÉJATE DE MI.

Fue ahí, cuando me di cuenta, que mi vida iba a cambiar...

Pero de manera negativa.

Sí me quería.

Me quería mucho.

Pero, el día que vio que usé por primera vez mi maldición, cuando vio a aquel portador de la maldición de 6 ojos, todo cambió. El día que mis hermanos nacieron, todo empeoró.

De ser su princesa, pasé a ser un cero a la izquierda.
Se dejó llevar por la ambición que terminó perdiendo a la mujer que quería, terminó perdiendo el cariño y el respeto de su hija mayor.

No me pude despedir de él. No le dije que, a pesar de todo, lo quería.

Llegamos hasta una biblioteca. O eso quiero creer ya que, desde la pequeña ventana, logro ver algunos libros. 

Al abrir la puerta, me doy cuenta que sí es una biblioteca. Bien hecho, Sunmi, acabas de hacer un gran descubrimiento.