27

1.8K 190 54
                                    

Engɑñɑme, engɑñɑme, ⌝

⌞ ve y engɑñɑme.

━━━━━━ ◦ ❖ ◦ ━━━━━━

En estos meses, Toge ha tenido un gran desempeño. Incluso yo. Ambos hemos dado nuestro mejor esfuerzo para poder controlar nuestro poder.

También, en estos meses, Nanami y yo hemos tenido una buena conexión. Tanto así, que podemos pasar horas sentados sin decir nada y pasarla bien.

— Ah, mierda...

Miré a Ieiri. Jamás la había escuchado expresarse de esa manera. Así que reí. Ella me miró de mala manera pero también queriendo reír.

— Lo siento, lo siento — dije —. Es que me dio risa.

— ¿Ya viste quién viene? — preguntó. Miré a la dirección donde había indicado con su cabeza.

— Mierda... — musité —. Un momento, ¿Ese de ahí no es Satoru?

— ¿Eh?

Podré tener buena vista pero no veo claramente porque las ramas del árbol me están impidiendo ver.

— Sí. Sí es. Está con Mei Mei — respondió Shoko. Suspiré —. Yo digo que vayas a clavarle una cuchilla en la garganta.

— Shoko — estiré su nombre. Ella rió a carcajadas.

— No. Mentira. Pero...

— No, Ieiri, no me dan ganas de matarla — volvió a reír. Negué sonriente.

Sé lo que valgo. Aunque al principio me costaba reconocerlo. No tengo miedo de perder a Satoru por una infidelidad, tengo miedo de perderlo en una batalla.
Suspiré.
Cuando llevo mi mirada nuevamente al frente, veo que se están acercando a nosotras.

— Es tu oportunidad.

— Ya te dije que no, Ieiri.

— ¡Hola! — exclamó Mei Mei. Su voz es un poco irritante. Tuve que fingir una sonrisa.

— Hola, Mei Mei — dijimos Ieiri y yo a unísono —. Hola, Utahime.

— Hola, chicas — respondió ella con más calma.

— Utahime, Mei Mei — mencionó Satoru —. Tengo algo importante que decirles.

— ¿Qué? — preguntó Mei Mei. Se sentó sobre mí regazo de golpe. Sí que pesa — ¿Me vas a prestar al fin ese dinero que te pedí?

— ¿Qué dinero? — pregunté confundida. Satoru sonrió nervioso.

— No. No te voy a prestar nada — respondió él, ganándose una mala cara de Mei Mei —. Es algo más importante que eso.

— No sé...

— Ya cállate y deja que hable — interrumpió Utahime. Satoru me miró con una sonrisa.

— Sunmi y yo somos novios — dijo. Sonreí con amplitud. Utahime me miró sonriente. Mei Mei, bueno... No encuentro palabras para describir su expresión.

— ¿De verdad? Pudiste haber conseguido algo mejor — me dijo, su peso lo cargó a mi muslo derecho mientras me abrazaba del cuello.

— Mei Mei, muévete, por favor — dije. Al parecer, todo lo que le digo le da risa.

— Pudiste haber estado conmigo — dijo, pasando la yema de sus dedos por mi mandíbula —. Yo jamás te haría daño. Yo jamás me acostaría con alguien más para sacar beneficio.

«Lovefool»; Gojo SatoruWhere stories live. Discover now